Rocío Flores es una mujer nueva tras participar en ‘Supervivientes 2020’. La hija de Antonio David Flores dejó todos sus complejos físicos en Honduras y ha vuelto totalmente renovada de la experiencia. Aunque su paso por la isla no ha servido para vivir un acercamiento con su madre, Rocío Carrasco, quien continúa guardando silencio, la joven se siente más fuerte y segura de sí misma que nunca. Un cambio más que evidente por dentro, pero también por fuera. La joven ha decidido cuidar al máximo su cuerpo y los últimos tratamientos estéticos a los que se ha sometido dan buena cuenta de ello.