“Me encanta pasar tiempo con vosotros. Me habéis hecho sentir muy cómoda. No me quiero ir, pero tengo que volver a mi vida. Muchas gracias por todo, por acogerme, por quererme y tratarme tan bien”, lo dice Rocío Flores Carrasco a su tía Gloria Camila y al novio de esta, Kiko, que también la considera su “sobri”. La hija de Antonio David y Rocío Carrasco ha pasado unos días en Madrid con la pareja y está tremendamente agradecida por lo vivido.
Aprovechando el puente de la Constitución, Ro visitó a la pareja en su nuevo nidito de amor. Tras un efusivo reencuentro con su tía y una puesta al día acerca de las últimas novedades de su vida, los tres visitaron un centro comercial para desespere de la joven que vive años instalada en Málaga. Según se queja Rocío, Gloria tarda demasiado cuando van de tiendas. La de ‘Supervivientes’ se para con todo y con todos, lo que retrasa la agilidad del ‘shopping’. Bueno, un defecto lo tiene cualquiera… Estas cosas acaba pasándolas por alto cuando la hija de Ortega Cano tiene sorpresas como la que tuvo con ella. Aprovechando un descuido de Ro, su tía le compró algunos detalles como un pijama y unos calcetines que le habían gustado a la ‘regalada’. Pero Ro tampoco quiso quedarse atrás en el tema regalos y compró dos pulseras grabadas, en la suya pone ‘Morena’, por Gloria, y en la otra ‘Rubia’, lo mismo que tiene cada una tatuado en su cuerpo.
Rocío y Gloria siempre han estado muy unidas, “desde que nos juntaron”, remarca Flores a Kiko en el vídeo que han publicado para el canal de los enamorados en Mtmad. Cuando Jurado y Ortega adoptaron a sus hijos, sus nietos ya habían nacido y pronto, las dos niñas, se convirtieron en íntimas. Una relación que se ha reforzado con el paso de los años. Algo que le encantaría ver a La Más Grande.