El verano de 2004 todo cambió cuando Rocío Jurado fue diagnosticada con cáncer de páncreas: "El médico me dijo 'el 80% no sobrevive' y tonta de mí le dije 'me da igual, ella está en el 20% restante", confesaba Rocío Carrasco entre lágrimas al recordar uno de los días más difíciles de su vida.
'Matar al león' ha sido el nombre elegido para uno de los episodios más difíciles para la protagonista de la docuserie. En él se ha desgranado con todo lujo de detalles la forma en la que Rocío Jurado y el resto de la familia afronta la enfermedad que se la llevaría solo dos años más tarde. Y sobretodo hace hincapié en las personas que lucharon por su bienestar.
"Cuando a nosotros se nos dice que tiene cáncer, no sabíamos el tipo. Tenemos el nombre pero nos falta el apellido y hasta que no la abrieran, no podíamos saber", cuenta Rocío. Pero, ¿por qué Houston? Rocío Jurado fue operada en Madrid y durante su convalecencia, la artista mantiene una conversación con Fidel Albiac que provoca un cambio de planes.
"Recuerdo estar con ella en la habitación y llegó Fidel (...) Mi madre pidió que se saliera todo el mundo y nos quedamos con ella. Fidel le dijo “Tienes lo que tienes, ya sabemos lo que es, y hazte a la idea de que delante tienes un león y solo tienes una bala. Si la usas para matarle, sino te come. Y para matar al león, creo que lo mejor es Houston. La decisión es tuya”".
Todavía en shock por lo que estaba viviendo y sin pensarlo dos veces, Rocío Jurado confió en Fidel y siguió sus consejos: "Ella se quedó mirándole y le dijo, yo también creo que es lo mejor". Carrasco cuenta como la artista le comunicó su decisión a Ortega Cano y aunque el diestro se opuso en un principio "a ella le dio igual". "Pensaba que se iba a curar", afirmaba su hija entre lágrimas.
Esta revelación deja patente que la relación de Rocío Jurado con Fidel Albiac era tan buena que no dudó en seguir sus consejos.