El décimo episodio de 'En el nombre de Rocío' no ha dejado indiferente a nadie. Bajo el título 'Nuevo testamento', Rocío Carrascoha hecho público con todo lujo de detalles el contenido de un documento anterior en el que Rocío Jurado castigaba a su hija en el reparto de sus bienes. En él, incluía a sus nietos con importantes legados y colocaba a Gloria Mohedano como administradora de la fortuna hasta que los jóvenes alcanzaran la mayoría de edad.
Según Rocío Carrasco, su tía Gloria Mohedano y José Antonio eran los únicos conocedores de este "testamento secreto", de ahí su sorpresa al conocer la última voluntad de la más grande en la que no solo dejó a un lado a sus nietos sino que declaró heredera universal a su hija mayor.
A lo largo de este episodio, Rocío Carrasco ha hecho pública la traición de Gloria Mohedano a la propia Rocío Jurado. La protagonista recuerda como Antonio David Flores le pone en ese momento una "modificación de medidas" con respecto a la custodia de sus hijos. "Él tiene información de que esto va a ser así y así se aseguraba que como sus hijos iban a heredar poder hacer y deshacer", recuerda Rocío. "Gloria le dice al Ser ‘tranquilo’ que si esta (Rocío Jurado) se muere tus hijos están cubiertos porque lo voy a administrar yo. Ese es el momento en el que él me pone la modificación de medidas".
"Gloria se estaría frotando las manos pensando en que yo tenía que contar con ella y que ella iba a ejercer sobre mí la misma influencia y la misma presión que ejerció sobre mi madre", exponía Rocío. Finalmente, Rocío Jurado cambió de manera radical el reparto y dejó a sus nietos fuera del testamento. Una decisión que para Rocío Carrasco solo tiene una lectura: "No quería que el Ser pudiera tocar nada que fuera suyo".