Revolución en 'GH': los no seleccionados abandonan el plató a grito de "tongo"

Los concursantes no seleccionados para quedarse en la casa acusaron a la organización de tongo y algunos decidieron marcharse de la gala

Los ánimos en GH Revolution están algo caldeados. Nada, por otra parte, que no haya ocurrido otras veces. Sentimientos a flor de piel, muchas ilusiones puestas y, claro, es inevitable cierto sentimiento de frustración cuando las cosas no salen como creías. Anoche, se decidieron, por fin, los dos últimos concursantes oficiales de la edición, algo que no sentó demasiado bien a algunos de los no seleccionados, que prefirieron abandonar en plató en directo.

Cada nueva entrega de GH es siempre una caja de sorpresas. Nunca sabemos qué va a ocurrir. Para bien y también para mal. Anoche, el plató del reality vivió un momento de tensión motivado por la elección de los últimos participantes oficiales de la edición. Un movimiento que dejaba ya fuera, definitivamente, al nutrido grupo que estuvo encerrado en la casa durante 48 horas antes del comienzo oficial del programa.

Cuidado que se me está sublevando el plató”, afirmaba Jorge Javier ante los gritos de la grada de 'casi concursantes'. Los no seleccionados se preguntaban qué iba a ocurrir a partir de ahora y no dudaron en comentárselo al presentador. “Está diciendo una persona que qué va a pasar con todos nosotros”, retransmitía Jorge Javier. Una duda que podría ser lógica pero que ya sabían que existía antes de comenzar con todo este largo proceso.

Rápidamente, otros de los aspirantes a concursantes se unieron a la protesta al grito de 'tongo', algo que el presentador quiso cortar de raíz por el bien del concurso y de la gala. “Si creéis que ha habido tongo, lo que tenéis que hacer es ir a los juzgados a denunciarlo libremente”, les aconsejó Jorge Javier con total tranquilidad. “Probablemente me eche encima a la dirección, pero os voy a pedir un favor. Si veis que no vais a estar cómodos, tenéis la total libertad de abandonar el plató”. Acto seguido, unos pocos se levantaron de su silla y procedieron a marcharse de la gala.

En un plató se viene a sumar, a pasarlo bien y a divertirse”, explicaba el presentador. “Aquellos que quieran estar aquí que se lo quieran pasar bien. Si no, tenéis la puerta abierta con total libertad”. Un ofrecimiento que algunos decidieron aceptar, aunque la mayoría continuó sentado en su silla. Tantos cambios, tantas emociones, tantas incógnitas, tenían que salir por algún lado. Aunque, tanto la respuesta de Jorge Javier, como la reacción de la mayoría de los no seleccionados, fue muy tranquila.

Desde luego, pocos formatos apelan tanto a los sentimientos como Gran Hermano. Ahí radica el éxito del programa y las muchas ediciones que lleva a sus espaldas.