Daniel Sancho (29 años) tiene marcada en el calendario una fecha muy importante. Cumpliendo prisión preventiva desde el pasado 7 de agosto en Koh Samui, donde está a la espera de juicio y donde permanecerá hasta que finalmente sea trasladado a otra de las cárceles del país asiático. Muy interesado por varios aspectos sobre su caso, el hijo de Silvia Bronchalo (44 años) podrá disfrutar muy pronto de un vis a vis familiar concedido gracias a los reyes de Tailandia. Un evento extraordinario que deberá solicitar para poder vivirlo.
Los monarcas de este país, concretamente el rey, es la persona con más poder y puede tanto indultar a un preso que haya sido condenado a pena de muerte o cadena perpetua como tomar cualquier tipo de decisión que tenga que ver con la justicia. Como signo de clemencia, Maha Vajiralongkorn (71 años) suele perdonar a algunos presos por el día de su cumpleaños. De hecho, fue lo que hizo con Segarra, que pasó a cumplir cadena perpetua, algo que podría ocurrirle también a Sancho. Pero esa fecha no es la única importante para los encarcelados en Tailandia. El aniversario de la reina también es un acontecimiento crucial. Celebrado el 12 de agosto, coincidiendo también con el día de la madre en el país asiático, la madre del rey concede como "regalo" a los presos solicitar un vis a vis muy especial con sus familiares el próximo 30 de septiembre. Un evento excepcional para el que Sancho deberá tener en cuenta varias cosas.
Todo lo que Daniel debe tener en cuenta
Lo primero que debe tener en cuenta Daniel para poder disfrutar del vis a vis es solicitarlo de manera online. Nada que ver con los encuentros físicos de las prisiones españolas, donde pueden producirse dos visitas al mes de familiares, personas con quien se tenga una relación (pareja) o un listado de unos pocos amigos íntimos (un total de cuatro), el acusado por el asesinato de Edwin Arrieta tiene una oportunidad increíble, ya que este tipo de encuentros no existen en Tailandia desde la aparición de la Covid-19. Por ahora en el país asiático solo podrá ver durante el resto del año a sus seres queridos a través e una mampara, con mascarilla y seguramente con un teléfono de por medio.
Eso sí, por poder, el chef culinario puede pedir una visita programada de forma excepcional al centro penitenciario, aunque es muy posible que no sea concedido. Y es que aunque desde la pandemia no existía esta opción, ahora se están planteando que se permita a quien cumpla con las normas de la cárcel pueda tener la posibilidad de un vis a vis al mes con los suyos si así lo deseara. Otra de las cuestiones que Daniel debe tener en cuenta en cualquiera de estos encuentros que sean concedidos es que es obligatorio el uso de mascarillas, ya que en Tailandia están muy pendientes del progreso del virus y siempre extreman las precauciones. Además, quien acuda a Koh Samui deberá hacerse un test para atestiguar que no son positivos, prueba a la que deben someterse 24 horas antes de la visita a prisión.
Quienes acudan a la prisión deberán también en cuenta con sus relojes el tiempo de cada visita. Y es que solo tienen dos horas como máximo para estar juntos. De hecho, los funcionarios del centro suelen estar muy pendientes para que todo termine a la hora determinada. Daniel además podrá sugerir qué turno quiere para que venga su familia, si de 9 a 11 de la mañana o de 1 de la tarde hasta las 3. Por suerte, el acusado de asesinato también tendrá la opción de pedir comida para él y el resto de visitantes de manera online. Una solicitud que debería de hacer el 29 de septiembre y con la que podría disfrutar de un plato que no sea el arroz que toma a diario.
Además, tal y como ha explicado Two Yupa en 'Espejo Público', los visitantes de Daniel tienen la oportunidad de llevarle regalos. Eso sí, deberán tener en cuenta que no sean muy ostentosos para no llamar la atención. Y es que ser hijo de un conocido actor español puede jugar en su contra. "Va a tener que cumplir en Tailandia de ocho a 10 años de cárcel como mínimo y si quieren mantenerle en las mejores condiciones posibles, se van a arruinar. Las hostias que recibes no las puedes comprar, y las personas famosas o de familia con dinero suelen pasarlo bastante mal", reveló Frank Cuesta.