Ha vuelto a pasar. María Patiño se ha llevado un rapapolvo, esta vez no de un compañero, sino de un entrevistado en directo, Julián Contreras, al que el programa 'Socialité' había convocado para desmentir que hubiera sido despedido del bingo en el que trabaja. Y, en efecto, las primeras preguntas que María le hizo a Julián versaron sobre ese tema y sobre la posibilidad de que estuviera buscando un nuevo trabajo, noticia que la periodista había dado durante la semana.
Julián aseguró encontrarse muy feliz en el bingo, donde trabaja todos los fines de semana, y aprovechó para afirmar que no todo lo que se dice de él es cierto. "Se han dicho muchas mentiras sobre mí, nunca he dicho que viviera con 160 euros al mes", ha dicho Julián. Reconoció que sí estaba en exclusión social "debido a mi situación judicial, que es complicada, pero no porque me hayan dejado de lado, eso no ha pasado".
El problema surgió cuando el programa le puso unas declaraciones de una confidente que dejaban en muy mal lugar a Julián. "No es la primera vez que te acusan de ser un irresponsable en el trabajo y de abuso de confianza", añadió Patiño. Al pedirle su opinión, Julián, de muy buenos modos, se enfadó bastante: "Me habíais dicho que veníais a hablar del bingo, no de esto. Al menos, me tendríais que haber avisado". María Patiño intentó justificarse. "Nos vimos hace unos días y hablamos de la posibilidad de que se abrieran nuevos horizontes laborales para ti y me pareció interesante". Julián siguió en sus trece. "Me teníais que haber avisado". Y como Julián se negaba a hablar más, se fueron a publicidad. La conversación que hubo en esos minutos no trascendió, aunque se pudo adivinar, por lo que pasó después, que a Julián no le gustó esta especie de traición.
A la vuelta de publicidad, Julián apareció en imagen con sus dos jefas, que hablaron maravillas de él y de su trabajo en el bingo. María Patiño, a la hora de despedir la entrevista, pidió un voto de confianza: "Creo que por lo que nos conocemos, esto no me lo merezco ¿Me das una nueva oportunidad?". Julián respondió: "Sí, claro. Aunque yo tampoco me lo merezco, pero te doy otra oportunidad porque te conozco y conozco a tu equipo". Al final, fumaron la pipa de la paz.
Hace unos días, María Patiño se llevó el broncazo padre por parte de Mila Ximénez. Sucedió en el plató de 'Sálvame', en el que volaron los cuchillos. Mila acabó abandonando el plató enfadadísima, dejando a su compañera con los ojos vidriosos y arrepentida. Fue en una discusión sobre la separación entre Makoke y Kiko Matamoros, cuando María desmintió la información que acacaba de dar Mila. "Me molesta que, a quien yo respeto, no me respete a mí ni a las informaciones que doy. Lo que has hecho es una falta absoluta de compañerismo y lo primero es el respeto". Mila estaba enfadadísima. "María, a veces, es muy poco generosa con sus compañeros, porque no deja hablar ni a Dios. Es como el 'sheriff' de la noticia, siempre la información buena tiene que estar en su boca. Pues estoy harta".
María, con los ojos vidriosos, reflexionó en voz alta. "Supongo que tendré que hacer autocrítica y mejorar en ese sentido por el bien de todos. Pero no me considero mala compañera. No me cuesta nada pedir perdón y tengo una forma de defender la información que a veces me ciega, y tendré que ser más consciente de ello".