El embarazo de Rebeca Jiménez, la Rebe de Plaséncia, no está siendo un camino de rosas. A su juventud y la sorpresa para toda su familia se le suma un importante problema: ante la noticia de ser padre, su novio se ha agobiado. La Miss Gitana se ‘escapó’ meses atrás con José y ahora están esperando un bebé, pero el canario, asfixiado por las responsabilidades y la familia de la novia, decidió marcharse a Tenerife dejando sola a su pareja en un momento crucial en su embarazo.
Sin obtener respuestas a sus llamadas o a sus mensajes, Rebeca tomó la opción por valerse por ella misma. Haría cualquier cosa por su hijo pues, para ella, lo que está viviendo es lo más importante que le ha ocurrido. A pesar del susto inicial de toda su familia por la noticia, todos se han volcado con la adolescente que ya sueña con acunar al bebé. Y mucho más tras verle en su primera ecografía. “Me ha dado mucha pena que no esté José. Se ha perdido ver a su hijo”, decía la joven apesadumbrada, sintiéndose abandonada por su pareja pero, en ningún momento, sola, pues sabe que con una familia como la suya jamás le faltará el consuelo.
Y cuando ya lo daba todo por perdido, se obró el milagro: José regresó. El joven acabó los asuntos pendientes que aún le ataban a Tenerife (un negocio de coches, aunque en realidad solo echaba de menos a su familia) y volvió al lado de su pareja para vivir, al fin juntos, el embarazo.