Una nueva polémica señala a Rafael Amargo. Cuando está a punto de cumplirse un año de su sonada detención tras ser acusado de pertenecer a una banda criminal, el conocido bailarín ha sido acusado de traficar con drogas por el juez que lleva el caso.
Juan Ramón Reig Purón lo tiene claro y ha concluido la investigación asegurando que hay indicios suficientes para acusar al artista y a los otros tres investigados, su mujer y dos de sus socios, como supuestos autores de un delito contra la salud pública, en la modalidad de tráfico de drogas, y otro de pertenencia a grupo criminal.
Lejos de quedarse ahí, en el auto se ubica a Rafael Amargo como cabecilla de la organización. Además, se señala la vivienda de la pareja como la base de las operaciones. Venta de estupefacientes que entregaban en mano o bien a través de servicios públicos. Por el momento, el bailarín ha preferido mantener silencio aunque ha mostrado su desilusión con lo sucedido: "Estoy tranquilo. El que no tiene nada que esconder, tranquilo tiene que estar. Durante un año he sacado mi carrera adelante y hacer que no pasaba nada. Lo que quieren hacer es matarme, una historia de envidias muy feas”, ha confesado en unas declaraciones a 'Ya es mediodía' este mismo martes.
En estos momentos, Amargo sigue volcado en sus compromisos profesionales y no piensa dejar que nada ni nadie enturbie su carrera profesional con acusaciones que él mismo tacha de "barbaridad". Tras quedar en libertad en diciembre del año pasado, el artista se sentaba en 'Sábado Deluxe' y afirmaba que había una "mano negra": "Soy inocente, pero muchos ya me han condenado sin haberse producido el juicio (...) Voy a tener que sufrir un tiempo. Pero está muy bien encauzado, al final del túnel está la guinda del pastel", decía el pasado mes de febrero. Ahora, las tornas han cambiado y el peligro por entrar a prisión es real.