El radical cambio físico y vital de Carlos Navarro 'El Yoyas'

El polémico concursante de 'GH 2' ha abandonado su aspecto de chaval del extrarradio de Barcelona por otro igual o más impactante

Carlos Navarro, más conocido por su apodo de 'El Yoyas', llegó a la casa de Guadalix hace ya 16 años para dinamitar todos los estereotipos del joven catalán que había en aquel momento. El concursante de la segunda edición de 'GH 2' era un chaval de 25 años en paro de Hospitalet de Llobregat, ciudad vecina de Barcelona, mal hablado y con un pronto explosivo. Precisamente fue su actitud violenta dentro de la casa con Fayna Bethencourt la que le costó su participación dentro de la casa y el programa acabó aplicándole una expulsión disciplinaria.

Después del flechazo tormentoso que vivieron hace 16 años dentro de Guadalix, Carlos y Fayna siguen juntos y, además, son padres de dos hijos que les han colmado de alegría.

'El Yoyas' ha sido un personaje secundario imprescindible en la primera década del siglo XXI. Tras su paso por el reality fue colaborador y tertuliano en programas legendarios como 'Crónicas marcianas'. Le había picado el gusanillo de la televisión y el espectáculo y le seguimos viendo en 'Sálvados' o 'Cazamariposas'.

Poeta, cantante, empresario... Pocos palos le han quedado por tocar a Carlos, que ha cambiado radicalmente de tercio y ha acabado muy vinculado a la política. Primero 'flirteo' con Ciudadanos, pero pasó a la formación DECIDE, con la que consiguió en 2015 a ser elegido concejal en Vilanova del Camí (Barcelona).

Esta trayectoria vital y profesional ha ido acompañada de un cambio físico asombroso. El ex 'Gran Hermano', que ahora cuenta con 41 años, ha abandonado sus características patillas y su corte de pelo de niño bien, que aderezaba con sus gafas de sol de estilo deportivo que le daban ese aire seguro y arrogante, seña de identidad de Carlos durante sus intervenciones televisivas. Ahora luce una melena larga y ondulada hasta media espalda, y una frondosa barba, que le da un aspecto más reflexivo, pero también más rockero.