Uno de los primeros nombres que confirmaron a Diego Matamoros que estaría sí o sí en su boda, fue su tía Mar Flores, hermana de su madre. Pero ayer, con la llegada de los invitados, la echamos de menos. Supuestamente, la exmodelo prefirió asistir para que, así, Kiko sí estuviera y no se viviera tensión en la familia. Una excusa que el propio colaborador televisivo calificó de este modo: "Ésta tiene más cara que espalda, no viene aquí porque no tiene un millonario invitado que pescar esta noche". Según él, nadie mas que Makoke, Laura y Anita sabían lo de su asistencia, por lo que, para él, Mar se tiró un farol. Y mientras su sobrino daba el ‘sí, quiero’ a Estela Grande, ¿dónde estaba la ex actriz de ‘Canguros’?
Mar, acompañada de sus hijos, estaba en Ibiza. La ahora diseñadora de bolsos, está pasando sus vacaciones en la isla balear y no interrumpió este plan para ver casarse al hijo de su hermana Marian. En estos días, Flores aprovecha para pasar más tiempo con sus hijos, llevarles a la playa, disfrutar de la naturaleza y cenar a la cálida luz de las velas, como anoche estuvo haciendo. Una cena para cinco con vistas al mar en lo que parece un restaurante especializado en pescado. Claro, en Ibiza conviene aprovechar los manjares de la tierra. Así que mientras su familia brindaba por la unión de Diego y Estela, ella, imaginamos, se acordaría de ellos a cientos de kilómetros.
Conviene recordar que, tanto para Diego como para Laura, su familia materna, el lado Flores, es muy importante. Ambos admiran la trayectoria de Marian y Mar y, de hecho, durante una época renegaron, en cierto modo, del apellido paterno y preferían ser conocidos por Laura y Diego M.Flores.