Qué fue del 'calvo' de la Lotería de Navidad: la vida a los 73 años del actor que engañó a todos

"Que la suerte te acompañe" era el lema del anuncio protagonizado por el actor que, desde 1998 hasta 2005, nos invitaba a participar en el tradicional sorteo extraordinario de Navidad

Montse Jolis
Montse Jolis

Periodista especializada en corazón y sociedad

Anuncio Lotería

Han pasado casi 20 años desde que dejó de aparecer, por estas fechas, invitándonos a jugar a la Lotería de Navidad, pero su rostro –y su calvicie– siguen en nuestra memoria como si fuera ayer. Eso sí, nos nos sabíamos ni su nombre, ya que todos lo conocíamos como 'el calvo de la Lotería'. Y con ese mote se quedó, lo que no impidió que se hiciera tremendamente popular.

Es británico y tiene 73 años

El calvo de la Lotería, en realidad, se llama Clive Arrindell y es un actor nacido en el país caribeño Trinidad y Tobago. Arrindell es de nacionalidad británica y ha vivido casi toda su vida en Londres. Nació en 1950 y tiene, por tanto, 73 años. Nunca se casó ni tiene familia y, lo que son las cosas, no se considera un hombre afortunado. Y lo que quizá sea más sorprendente para todos: el calvo de la Lotería ¡no es calvo!

Clive Arrindell

Clive Arrindell se hizo muy popular como 'el calvo' de la Lotería.

Gtres

Es cierto que se presentó al casting del anuncio completamente rapado porque así lo exigía el personaje de una obra de teatro que estaba representando por aquel entonces. Como era el único candidato que se presentó sin pelo llamó la atención de los directores del casting, que vieron en él a la persona ideal para representar ese espíritu de la Navidad que requería el anuncio.

"Estaba en la obra de teatro 'Antonio y Cleopatra'. Interpretaba a tres actores: el primero era Mardiano, el eunuco, que llevaba la cabeza rapada. El segundo era Pompeyo, un hombre muy enfadado, y el tercero era un payaso, por el cual llevaba una peluca terrible. Y mientras hacía esta obra me presenté alcasting para la lotería española, y me cogieron. Y desde entonces, siempre me han pedido que me afeitara la cabeza. De todos modos he perdido mucho pelo ahí arriba, me queda muy poco...", declaró Arrindell en 2013.

Ocho años rapándose la cabeza para rodar el anuncio

Así, durante los ocho años que protagonizó el spot, de 1998 a 2005, tuvo que raparse la cabeza todos los años antes de rodar. Fue tal la repercusión que tuvo su personaje que dejó de representarlo porque ensombrecía a la marca, esto es, al propio sorteo de la Lotería, de modo que él siguió cobrando cuatro años más –tenía contrato hasta 2009– pero sin hacer el anuncio. A decir verdad, su participación hizo que la venta de décimos de la Lotería de Navidad se incrementara una media de un 11%, que no está nada mal.

En 2013, Clive Arrindell regresó a España para tomar parte en la campaña navideña de Acción contra el Hambre. Para la campaña tuvo que volver a raparse la cabeza y vestir, una vez más, con su camiseta, pantalón y abrigo negros, y lucir la imagen con la que siempre lo recordaremos. Un año después, en 2014, Arrindell protagonizó junto a María Adánez la película 'Cowboys', de Bernabé Rico. Su personaje nada tenía que ver con el del anuncio navideño, aunque su look fuera el mismo.

Clive Arrindell

El actor rodó en España 'Cowboys'.

Participó en la primera temporada de 'The Crown'

Esa característica, aparecer calvo, impediría que lo reconociéramos en otros trabajos que ha realizado el actor británico, como el que hizo en 2016 en la primera temporada de 'The Crown', en el que tuvo un pequeño papel, el de propietario de un periódico. Pero, claro, con pelo. Irreconocible para el público español.

Clive Arrindell en 'The Crown'

Clive Arrindell en 'The Crown'.

Netflix

Por lo demás, la profesión no ha sido muy generosa con Clive Arrindell. Algunos anuncios, algunas obras de teatro y, de vez en cuando algún episódico en series de televisión. Claro que los anuncios que hizo de la Lotería –y los que no hizo, pero se los pagaron– le han proporcionado un buen colchón para vivir con cierta tranquilidad económica. Arrindell cobró 120.000 euros por cada anuncio, según reveló el rotativo británico The Guardian, por lo que se embolsó la bonita cantidad de 1,44 millones de euros en doce años solo con el famoso spot navideño.

En 2019, Arrindell protagonizó otro anuncio en España, el de los langostinos Pescanova, también en Navidad. Su personaje, también calvo, lucía un fronsoso bigote que, al frotarlo, aparecía una lluvia de 'rodolfos'.

Clive Arrindell

El actor, en la campaña navideña de Acción contra el hambre.

Gtres

El actor, en la actualidad

Clive Arrindell reside en Londres, la ciudad en la que se crio. En 2018 concedió una entrevista a El Mundo en la que explicó que no tiene familia, perdió a sus padres en muy poco espacio de tiempo y sufrió también la muerte prematura de dos sobrinos, en un lapso de apenas dos años, algo que le afectó mucho. "Mis padres murieron con más de 90 años, pero las tragedias de mis sobrinos han sido terribles". Los dos jóvenes tenían 30 años.

Nunca se casó ni ha tenido descendencia, porque él mismo se autocalifica como una persona "tóxica", sin demasiada suerte en sus relaciones. "He tenido muchas novias y no me duran. De más joven las tenía porque me gustaba mucho el sexo, pero con la edad eso ha ido amainando y ahora casi me alegro de no haber tenido hijos ni creado una familia", explicó en la citada entrevista.

Goza de buena salud, aunque reveló que su vida no ha sido un camino de rosas. "Llevo muy mala racha. Con todo ello tampoco me sale trabajo. No estoy en mi mejor momento, aunque tengo buena salud", admitió.

Un hombre que ha dejado huella

En los anuncios de la Lotería que todos recordamos, Clive Arrindell nunca habló, pero la huella que dejó en nuestra memoria no se ha borrado. Que Loterías y Apuestas del Estado decidiera prescindir de él para sus anuncios del sorteo extraordinario de Navidad fue un gran error, según declaró a El Mundo en 2007 Santiago de Mollinedo, director general de Personality Media.

"El calvo transformó algo tan frívolo como un sorteo en un nexo entre el azar y la Navidad. Lo envolvía todo y daba ese puntito de calidez que todos necesitamos en esas fechas. A pesar de su imagen misteriosa, despertaba un sentimiento hogareño y se convirtió en sinónimo de Navidad. Por eso, crear un concepto sobre un personaje, consolidarlo con tanta rotundidad, y cuidarlo para después abandonarlo no tiene explicación alguna. Loterías y Apuestas del Estado, abandonó a su propia marca o, lo que es lo mismo, a su mejor vendedor de Lotería", dijo Mollinedo.

Casualidad o no, el anuncio de la Lotería le sirvió a Arrindell para trabajar bastante en España, país que adora y del que le gusta, según ha dicho, todo. "No puedo decirte qué es lo que más me gusta, pero te puedo decir todas las cosas que me gustan de España. Me gusta la comida, me gusta la pasión, me gusta el aspecto de la gente, las mujeres, me gustan los coches, el clima, todo. De España me gusta todo", declaró.