Qué es la máquina de los deseos: la nueva herramienta de ‘GH VIP’ que les hará perder mucho dinero del premio final

La casa de Guadalix de la Sierra ha vuelto a abrir sus puertas. Aunque la construcción sea nueva, el espíritu es el mismo. Ha pasado demasiado desde la última vez que lo hizo. Hay cuentas pendientes que algunos aún tienen que rendir, pero es no es lo que compete ahora. 'GH VIP 8' acaba de empezar su andadura. Lo hace con un casting lleno de celebrities que tienen mucho que contar. Hay perfiles de todo tipo, y personalidades más o menos conocidas. Lo que es seguro es que todos ellos vivirán esta experiencia a flor de piel (sino que se lo digan a Oriana, quien ya ha tenido su primer intento de abandono cuando solo llevaba unas horas en la casa). 

'GH VIP 8' promete traer un sinfín de sorpresas y esta vez estarán Marta Flich (45 años) e Ion Aramendi (46 años) como conductores del concurso. "Esta es vuestra casa, siempre lo ha sido. Ha pasado mucho tiempo, la notaréis cambiada, otra forma, otro color, pero es imposible no reconocer su esencia. Son muchas las horas que hemos pasado aquí y muchas las veces que hemos vibrado a la vez que sus habitantes... Dicen que aquí todo se magnifica, que la experiencia se convertirá en la mejor de vuestra vida. Que nada volverá a ser igual y todo es una verdad, Gran Hermano cambia las personas", aseguraba la presentadora al inicio de la primerísima gala de esta edición.

"Hoy, la vida en directo regresa a golpe de latido, el de la famosa voz que todo lo envuelve. El ojo que todo lo ve nunca ha dejado de observarnos. Ahora sí, estamos listos", añadía. La casa de 'GH VIP 8' está llena de color y está hecha de forma ecológica y sostenible. En su interior hay muchas novedades. Entre ellas, que parte del mobiliario va a ser protagonista de la edición.

Suena raro, sí, pero seguro que tomará sentido a medida que avance la competición. Entre las muchas novedades, la que más ha llamado la atención ha sido 'La máquina de los deseos'. Pero, ¿qué es exactamente? 

El dinero del premio final peligra con esta nueva herramienta de ‘GH VIP’

El ganador de 'GH VIP 8' se llevará a casa un premio de 150.000 euros, o esa es la teoría. Por primera vez en la historia del concurso, esta cifra podría variar. Todo depende de las decisiones que vayan tomando los habitantes de la casa de Guadalix de la Sierra. La dinámica parece algo compleja, pero la explicaron exhaustivamente durante la gala inaugural. 

Los casilleros que componen La máquina de los deseos esconden auténticos tesoros. Hay premios de todo tipo. Entre ellos están los teléfonos móviles personales de acada uno de los concursantes, pero acceder a ellos tendría un coste de 8.000 euros. La cifra es elevada, sí, pero la organización de 'Gran Hermano VIP' ha pensado en todo. Otros tesoros son una 'suite' para dos personas, valorada en 5.000 euros; la inmunidad en unas nominaciones, con un precio de 12.000 euros; crema de cacao, 100 euros...

Siempre que se ilumine un casillero, se podrá utilizar. Los precios de los tesoros pueden aumentar con el paso de los días. Lo que deben que tener en cuenta es que si alguien accede a alguno de estos tesoros de 'la máquina de los deseos', el precio correspondiente se descontará de los 150.000 euros reservados para el ganador de la edición.

'La cueva al pasado', otro nuevo espacio de la casa 

La casa de 'Gran Hermano' es nueva, sí, aunque mantiene el espíritu de la anterior. Está decorada con colores vivos y mobiliario que hará que los concursantes se sientan como en casa. Hay diferentes espacios en los que podrán convivir y disfrutar de las pruebas y las galas, pero también hay un ascensor. Este elemento tendrá mucho que decir también en esta edición de 'GH VIP 8', ya que les puede llevar a cualquier época, más en concreto en el Paleolítico, donde toma protagonismo 'la cueva del pasado'.

Se trata de un lugar frío, húmedo, incómodo. No es ni llamativo ni apetecible, pero allí tendrán que vivir seis de los concursantes. Estarán sin maleta, sin cama, sin espejo, sin comodidades y sin baño, al menos tal y como lo conocemos a día de hoy. ¡Menudo reto!