El proyecto desconocido de Lola Orellana, la misteriosa hija de Rosario Flores, con el que rompe la tradición familiar

La otra Lola de los Flores, la que no es Lola Flores, ni Lolita, la que heredó el nombre de su abuela, pero ni canta ni baila ni tiene ganas de hacerlo. Ella se apellida Orellana y si se parece en algo a la fallecida folclórica es en sus rasgos morenos y sus ojos negros. Pero a ella el arte le sale de las manos y no de la garganta ni de los pies, y si algo se diferencia de su abuela, a la que no llegó a conocer, es el que prefiere, y así lo ha demostrado, vivir lejos del foco y de los escenarios.

El proyecto más personal de la hija de Rosario

Lola Orellana es la hija de Rosario y su exmarido Carlos Orellana, tiene 28 años, y pese a que cuando cumplió los 18 se sucedieron los titulares porque dada la saga de la que viene conocerla causaba mucha curiosidad, ella siempre prefirió mantenerse en el anonimato. Aunque sí ha querido expresarse de manera pública, expresarse mediante el arte. Y es que hace tres años dio de alta un perfil anexo al suyo personal en redes sociales para dar rienda suelta a su creatividad y mostrar al mundo sus ilustraciones. Ilustraciones en blanco y negras y hechas de manera digital,

Comenzó con muchas ganas y, poco a poco, sus publicaciones se han ido espaciando en el tiempo, pero el perfil sigue activo, el proyecto se llama Indiagitana.art.

El trabajo desconocido de Lola Orellana

Pero no es lo único a lo que se ha dedicado ni mucho menos. Ella se formó en Londres en producción y, desde que regresó a España, ha participado en diferentes proyectos cinematográficos detrás de las cámaras.

Un ejemplo de ello es la serie ‘Dime quién soy’, donde fue ayudante de producción y, antes, de casting. También participó en ‘Juego de tronos’. En la parte que se rodó en España, Lola Orellana fue una de las ayudantes de dirección, lo que sin duda es un gran hito que siempre recordará en su carrera. Su padrastro, el marido de su madre, Pedro Lazaga, es cineasta, y ella tiene muy buena relación con él, aunque también la tiene con su padre, pero, quizá, esta influencia en casa, es lo que le ha hecho conocer esa otra parte del arte que está menos valorada, pero que no es menos importante.

Lo que Rosario quiere para ella

Y es que, para ella, y sobre todo para su madre, la libertad de poder hacer lo que quiera porque no es alguien muy reconocido es importante. Rosario siempre ha tenido esto en cuenta y ha querido esto para sus hijos, porque ella siempre sintió que ser hija de quién era le había robado la libertad. Así lo confesó ella misma en una entrevista hace años: "Si de algo estoy orgullosa es porque a mis hijos no los conoce nadie. Ser famosa te marca. Y para mí sería muy egoísta hacerles a ellos famosos. Mi hija, por ejemplo, ahora está trabajando en cine. Puede trabajar de lo que quiera porque no la conoce nadie. Yo no he sido libre nunca".

Esta y otras muchas cosas son las que Rosario ha vivido y no ha querido que sus hijos repitieran. De hecho, hace solo unos días, en otra entrevista con ‘Esquire’, la cantante hablaba abiertamente de las drogas y explicaba cómo le habían afectado y cómo esto ha cambiado."Yo vengo de una generación en la que estaban en nuestro día a día, así que podríamos decir que soy una superviviente de esa época”, explicaba y añadía que sus hijos: “se cuidan mucho. Nosotros éramos más autodestructores y mi generación ha sido la peor de todas".

En el terreno personal, por ahora, a Lola no se le ha conocido ninguna pareja, de hecho, es muy poco lo que se sabe de ella, aparte de lo que muestra en sus redes sociales donde, lo que queda claro, es que es muy familiar y que tiene un gusto exquisito para la fotografía.

Lola se lleva muy bien con su familia materna a pesar de que vive lejos porque reside actualmente en Vitoria, pero está y siempre ha estado muy unida a sus primos, Alba, la hija del fallecido Antonio Flores, y Elena y Guillermo Furiase, los hijos de Lolita. De hecho, es madrina de la hija pequeña de Elena, Nala. Pero si tiene pasión por alguien es por su hermano, Pedro Lazaga, que está a punto de cumplir 19 años, que si ha heredado de su madre y su abuela su pasión por la música, y que ya ha ocupado titulares por mantener una relación con Lucía, una joven de 23 años hija de Alba Molina.