La profunda reflexión de Xenia Tostado mientras Rodolfo Sancho permanece en Tailandia

Xenia Tostado (42 años) necesita expresarse. Esto reflejan las últimas publicaciones de su perfil de Instagram en las que ha ido compartiendo cómo se siente y cómo lleva el giro brutal que ha dado su vida en los últimos meses. A Xenia le sorprendió en pleno verano el crimen de Daniel Sancho (29 años), hermano de su hija. El hijo de Rodolfo Sancho presuntamente mató y descuartizó a su amigo Edwin Arrieta en un bungalow de Koh Phangan en Tailandia destrozando a sus padres, Rodolfo Sancho (48 años) y Silvia Bronchalo, y al resto de miembros de su su familia y amigos. Según los responsables de la investigación del caso el joven chef español quería terminar con una relación oculta que mantenía con el cirujano colombiano pero este se oponía llegándole incluso a amenazar supuestamente.

Esta semana está siendo especialmente complicada para la familia de nuevo. Daniel Sancho tenía que comparecer frente al juez, tras el informe presentado por la Fiscalía en la que vuelven a pedir pena de muerte para él por el supuesto asesinato premeditado del médico colombiano, pero consiguió que su declaración se pospusiera hasta mediados de noviembre.

Todo esto ha pillado a su padre Rodolfo Sancho en Tailandia y por tanto alejado de su pareja. Xenia Tostado, a miles de kilómetros de Rodolfo Sancho, ha vuelto a lanzar una controvertida reflexión. "La religión es para la gente que tiene miedo de irse al infierno. La espiritualidad es para quienes ya han estado allí", ha compartido la actriz a través de sus historias de Instagram.

Xenia Tostado y Rodolfo Sancho, separados por miles de kilómetros

Xenia, el gran apoyo de Rodolfo en estos delicados momentos, ha visto crecer a Daniel y tal y como ha confesado en sus redes sociales le "duele el mundo" tras todo lo que está pasando con él. Daniel Sancho está en prisión preventiva en Koh Samui desde el pasado 7 de agosto a la espera de juicio y la policía tailandesa encargada de investigar su caso pide para él una condena de pena de muerte. La familia de Daniel tiene por delante momentos muy duros. Hace unos días, Xenia Tostado regresaba a Instagram con una reflexión sobre el discurso de Meryl Strepp en los Premios Princesa de Asturias, pero a esa publicación siguió otra en la que expresaba todo lo que el paso al frente de la actriz hollywodiense le ha removido tras varios meses y muchas semanas totalmente blindada.

Xenia Tostado lanza un enigmático mensaje

"Que vivan las fotos que no se publican y los momentos que nadie sabe que pasaron" se puede leer en esta nueva publicación. Xenia Tostado, al igual que el padre de su hija, Rodolfo Sancho, siempre ha sido muy escrupulosa de su vida privada. Sí que compartía momentos de su vida en redes pero sin entrar en su rutina. Con esta frase, que ella ha llevado siempre a rajatabla, ha querido también enviar un mensaje 'oculto' y es que en estas últimas semanas se habla mucho de su familia y cómo se encuentran pero ella ha querido dejar claro que hay momentos "que nadie sabe que pasaron".

Xenia Tostado no se separa de Rodolfo Sancho

Xenia Tostado ha vivido en primera persona el fuerte dolor que la situación de Daniel Sancho ha provocado en su pareja. En su primer comunicado, la actriz así lo expresaba: "Estoy al lado de mi pareja en este profundo dolor que atraviesa como padre, nadie se hace una idea. Desde la fortaleza que somos los dos, vamos a proteger a nuestra hija por encima de todo, ella es nuestra prioridad". Xenia ha cambiado muchos aspectos de su vida desde que el caso estallara pero se ha mostrado cada día y a cada minuto al lado de su Rodolfo Sancho y junto a él ha vivido momentos que solo ellos saben, tal y como desliza en su última publicación. La actriz ha dejado entrever que el actor está completamente desolado pero ha reiterado la unión inquebrantable que existe entre ellos. Ahora le apoya en la distancia, mientras él está en Tailandia acompañando a su hijo en prisión y trabajando en la mejor defensa para él.

La pareja reside desde hace años en la localidad de Corralejo, en la isla de Fuerteventura, una vida tranquila frente al mar que se vio alterada en pleno verano por la peor de las noticias. Una casa unifamiliar de tres plantas dividida en tres dormitorios, dos baños, un aseo y una enorme terraza. Además, cuenta con un enorme jardín de 184 metros cuadrados con zona chill out y piscina que se ha convertido en su refugio y su búnker mientras esperan, con el paso del tiempo, retomar en la medida de lo posible su normalidad.