La vida de Susana Molina ha dado un giro de 180 grados desde su participación en ‘La isla de las tentaciones’, el formato que ha revolucionado a los espectadores en el inicio de 2020. Dejando de lado su corazón, que quizás ya podría tener dueño, la joven ha estrenado nueva residencia en Madrid y también, nuevo canal de Mtmad, en el que semana a semana cuenta detalles hasta ahora desconocidos de su vida.
Si hace unos días explicó su dura lucha contra la ansiedad, la joven ha aprovechado para, en esta ocasión, invitar a un gran amigo. Desde que se mudó a Madrid, Susana ha visto como José Obando se convertía en una persona muy importante en su vida. Aunque ambos se conocían ya en Sevilla de coincidir en diversos eventos, no ha sido hasta después de su ruptura con Gonzalo cuando han comenzado a compartir muchos más momentos.
Susana y José han aprovechado para demostrar la fuerza de la amistad ante la cámara. Además, también han desvelado detalles hasta ahora desconocidos. En concreto, la ganadora de ‘Gran Hermano’ ha hablado sobre el grave problema de celos que la llevó a hacer grandes locuras con algunas de sus exparejas.
Ante la pregunta de si había hecho locuras por amor, Susana ha revelado que más bien las había hecho por celos. “Yo las que he hecho no son tanto por amor, por loca celosa. Yo antes era super celosa. Tenía una cena con mis amigas, pasaba antes por su casa para ver si estaba su coche, le tocaba el capó para ver si estaba caliente... pero eso no es por amor, sino porque era tonta”, ha asegurado la joven.
Un problema que superó y que ya no estuvo presente durante su relación con Gonzalo. Eso sí, la joven está totalmente convencida de que entró en Gran Hermano gracias a una redacción en la que tuvo que explicar algunas de sus vivencias con sus exparejas y en la que ella explicó sus locuras por los celos.