Primeras imágenes de Álvaro Falcó e Isabelle Junot, tras la muerte de Marta Chávarri

Marta Chávarri ha fallecido en su domicilio madrileño esta madrugada. Un infarto cerebral ha acabado con la vida de la famosa más perseguida que acabó prefiriendo una plácida vida alejada de los focos. Los primeros en presentarse en el piso, ubicado en uno de los barrios más caros de la capital, han sido el hijo y la nuera de la fallecida. Los rostros de Álvaro Falcó e Isabelle Junot reflejaban lo devastados que se hallaban. 

El cuerpo sin vida de Marta Chávarri ha sido encontrado esta madrugada por su personal de servicio. Su casa se había convertido en su refugio y en su búnker y ahí ha acabado sus días. La trabajadora llamó a las emergencias y una ambulancia se personó en el piso; pero nada se pudo hacer por Marta más que certificar la hora de su muerte. 

La que antaño frecuentase eventos y fiestas, hacía más de dos décadas que  había cambiado de vida. Completamente alejada de todo el brillo de los 80 y los 90, la madre de Álvaro Falcó se centró en mantener un perfil más bajo, especialmente a raíz de vivir un accidente en el baño de su casa, que necesitó varias cirugías pare reconstruir su mentón. 

Tras confirmarse el fallecimiento, las primeras reacciones han llegado por parte de su hijo y de su nuera; sus seres queridos más allegados junto a sus dos hermanas, María e Isabel, sus grandes apoyos. A eso de las once y media de la mañana, los fotógrafos captaban las primeras imágenes de Álvaro Falcó y de Isabelle Junot, los dos ocultos bajo unas gafas de sol y completamente destrozados. 

Álvaro Falcó e Isabelle Junot, rotos tras vivir su época más feliz

El fallecimiento de Marta Chávarri, apenas un mes más tarde de convertirse en abuela, rompe una felicidad que se las prometía idílica. El 11 de junio, los dos jóvenes dieron la bienvenida a su primera hija en común, Phillippa, un homenaje al abuelo de la pequeña, Phillippe Junot. Quien, casualidades de la vida, también estuvo vinculado con la ‘socialité’, tras su ruptura con Alberto Cortina. 

Marta Chávarri estaba realmente feliz en su papel como abuela. Era un rol que estaba encantada de ejercer. Podía disfrutar de la pequeña sin tener que renunciar a su vida cotidiana y completamente anónima. Algo que no pudo tener en el enlace de su hijo, donde pidió estar en otra habitación para no sufrir el agobio de la gente. Tampoco le apetecía posar para las fotos y su hijo, obedientísimo, aceptó todo. Para ser abuela no hacía falta nada de esto y podía seguir parapetrada en su perfil bajo; así que estaba satisfecha. Lamentablemente, no ha podido disfrutar de la pequeña bebé todo lo que abuela y nieta merecían. 

Álvaro Falcó, huérfano tras la muerte de su madre, Marta Chávarri

Tras la repentina muerte de Marta Chávarri, Álvaro Falcó queda completamente huérfano. En tres años ha tenido que despedirse de sus dos progenitores y los dos, además, de una manera rápida. 

En 2020, apenas unos meses después del fallecimiento de Carlos Falcó, llegaba la muerte, también debido al covid-19, de su hermano menor, Fernando. Un auténtico varapalo para Álvaro, su único hijo. Entonces, arropado por su novia, Isabelle Junot, y por su prima Tamara Falcó, tan cercana para él, logró pasar el duelo. 

Tres años más tarde, y en el que se prometía uno de los momentos más dulces de su vida, debe encarar un nuevo duelo. Se despide de su madre, la mujer que fue más importante para él y de la que tuvo que vivir separado cuando el juez le dio su custodia a su padre. Fueron años duros para ambos, pero, afortunadamente el vínculo madre e hijo fue irrompible. 

Isabel Chávarri, abatida tras el fallecimiento de su hermana Marta

Otro miembro del núcleo duro de Marta Chávarri, su hermana Isabel, también ha sido vista a escasas horas de la muerte de la 'socialité'. Rodeada de sus hijos, con gafas de sol y sin parar de secarse las lágrimas, la tía de Álvaro Falcó estaba completamente destruída. 

Las Chávarri siempre fueron unas hermanas tremendamente unidas, y, con el paso de los años, se convirtieron en el pequeñísimo círculo de confianza de la esquiva Marta. María, e Isabel eran de las pocas personas que tenían acceso a esa casa en la que a la madre de Álvaro pasaba horas pintando. Las otras dos mujeres que también tenían entrada preferente al domicilio, eran sus amigas de toda la vida: Paloma Segrelles y Elena Cúe. Que hoy habrán vivido el adiós de su buena amiga como una noticia impactante y devastadora.