Rudy Fernández ha vivido una de las noches más emocionantes de su carrera deportiva. España ha ganado a Francia la final del Eurobasket con él como capitán y no ha podido evitar las lágrimas tras la victoria. El abrazo con su mujer, Helen Lindes, y sus hijos lo ha dicho todo. En sus primeras palabras tras el partido y muy emocionado ha querido acordarse de su padre. Rodolfo Fernández falleció hace unos meses a los 66 años, un palo para el deportista que estaba muy unido a su progenitor.
"Me falta un gran pilar que es mi padre y sé que nos ha ayudado desde arriba. Lo que ha hecho este grupo ha sido especial. Capitanear a este equipo ha sido todo un orgullo. Han trabajado con humildad, se lo merecen", ha dicho Rudy Fernández a las cámaras de Mediaset sin poder evitar romperse. Nada más conseguir su medalla de oro, Rudy la ha besado y ha mirado al cielo acordándose de su padre.
Cuando Rudy Fernández perdió a su padre se quedó sin uno de sus pilares fundamentales. Rodolfo Fernández fue quien inculcó el amor por el deporte y el baloncesto a sus hijos, Rudy y Marta, a los que dejó devastados con su pérdida, al igual que a su esposa Maite.
No es la primera vez que Rudy Fernández se ha acordado de su padre en este Eurobasket, ya comentó que sentía como su padre le estaba ayudando "desde arriba". "Para mí este año ha sido muy duro. Duro porque no está mi padre y la verdad es que lo estaría disfrutando muchísimo". Para el deportista su familia es lo más importante, de hecho ha demostrado en este campeonato que su matrimonio con Helen Lindes, la madre de sus hijos, está en su mejor momento.
Helen también perdió a su madre en la pasada primavera, pocos días después de la muerte de su suegro, y está volcada en su marido, sus hijos y también en su suegra, Maite, de la que nunca se separa. La pareja forma un matrimonio consolidado y una familia muy feliz junto a sus hijos Alan y Aura. Pero ahora están atravesando uno de sus momentos más difíciles con dos pérdidas tan importantes como la de la madre de ella y el padre de él. La victoria en el Eurobasket ha sido un motivo de alegría tras su verano más duro.