Ha llegado el día en el que, para consuelo de todos, vamos a dejar de sentir envidia por Laura Matamoros. Parecían eternas, pero todo lo bueno llega a su fin. Incluso para la finalista de 'Supervivientes'. Desde el aire, acaba de decir adiós a Camboya, la última de las paradas de sus increíbles vacaciones.
Desde que volvió de Honduras, ha disfrutado del mejor verano de su vida. No solo se ha 'pegado' un viaje espectacular con más etapas que la Vuelta a España, sino que ha tenido al mejor compañero que jamás hubiera podido imaginar: su novio. Laura y Benji se han hecho inseparables y este casi mes y medio en el que han estado yendo de aquí para allá les ha unido más que nunca.
"Se acabó lo que se daba", ha escrito con pesar la hija de Kiko Matamoros. Un verano increíble que arrancaba con una noticia triste, pues fallecía Ángel Nieto, tío de Fonsi, uno de sus mejores amigos. Después de unos días de desconexión en Ibiza (que coincidió con este triste paréntesis que consternó a todos), Laura puso rumbo al Sudeste Asiático. Indonesia (con parada en Bali), Malasia, Vietnam y Camboya han sido los exóticos escenarios de su periplo estival y de las manifestaciones de amor hacia Benji. Justamente, desde los paradisiacos atardeceres de Bali, Laura hizo una declaración de amor tan original como sincera: "Te quiero. ¡Más que a los filetes 'empanaos' con patatas fritas!". Y que la hija del colaborador de 'Sálvame' te quiera más que a su plato favorito y que lo grite en las redes sociales, si que tienes que haberle robado el corazón.
Laura Matamoros ha disfrutado unas vacaciones a todo lujo, imitando a su amiga Alba Carrillo. Ambas parecían empeñadas en pulirse todo lo que han ganado con 'Supervivientes'. En el caso de la ganadora de 'GH VIP 4', la hemos visto disfrutando de la gastronomía y los atractivos del Sudeste Asiático en los establecimientos más singulares. Pocas cosas se ha quedado por hacer: descubrir tesoros de las profundidades en maravillosas jornadas de buceo, encontrar la paz en templos budistas, asombrarse del bullicio de ciudades como Kuala Lumpur, y dejarse querer por Benji, como no.