Plácido Domingo ha pedido perdón este martes 25 de febrero a través de un comunicado a todas las mujeres que le acusaron de acoso sexual por “el dolor causado”. Además, ha asegurado que acepta “toda la responsabilidad” de sus acciones.
“Me he tomado un tiempo durante los últimos meses para reflexionar sobre las acusaciones que varias compañeras han hecho en mi contra. Respeto que estas mujeres finalmente se sintieran lo suficientemente cómodas para hablar y quiero que sepan que realmente lamento el dolor que les causé. Acepto toda la responsabilidad de mis acciones”; ha asegurado Plácido Domingo a través de un comunicado.
“Entiendo ahora que alguna de esas mujeres pudieran tener miedo para expresarse honestamente porque les preocupaba que sus carreras se vieran afectadas”, ha continuado el tenor, quien también ha reconocido que nunca fue su intención hacer sentir a nadie de esa forma. “Mi ferviente deseo es que esto resulte en un espacio más seguro para trabajar y espero que mi ejemplo empuje a otros a seguir mis pasos”, ha finalizado.
Este comunicado llega después de que una investigación del sindicato estadounidense de los artistas de la ópera concluyera que Plácido Domingo acosó sexualmente a mujeres y que abusó de su poder cuando era director de la Ópera Nacional de Los Ángeles y Washington, según ha publicado ‘The Associated Press’. En concreto, la organización concluye que estos comportamientos se repitieron durante al menos dos meses.
Plácido Domingo tuvo que hacer frente a nueve acusaciones de mujeres a finales de agosto que aseguraron que mantuvieron encuentros con el tenor español bajo la amenaza de este de influir negativamente en su carrera si no accedían. A ellas se unieron 11 testimonios más, la mayoría de ellos anónimos, que coincidían en que el tenor las presionó para que mantuvieran relaciones sexuales.
Unos hechos que en un principio el tenor negó. “Las acusaciones de estas personas anónimas que se remontan hasta tres décadas atrás son profundamente preocupantes y, tal como se presentan, inexactas”, afirmó entonces, donde también confirmó que creía que sus interacciones y relaciones eran “siempre bienvenidas y consentidas”. Como consecuencia de las mismas, Plácido dimitió como director general de la Ópera de Los Ángeles y se cancelaron varias actuaciones suyas.