Fue un pilar fundamental en su vida, una de las mujeres que más la han influido como mujer. Su pérdida fue un mazazo y digerir e imaginar la vida sin ella puso el mundo de Lara Álvarez del revés. La presentadora de Telecinco ha hablado con Lecturas y, en nuestras páginas, se ha sincerado sobre uno de los momentos más duros que ha atravesado en su vida. Hace siete años perdía a su abuela, a quien estaba muy unida, y el impacto fue de tal intensidad que, sincera con ella misma y sus emociones, dio el paso de ponerse en manos de una psicóloga que la ayudó en el proceso de duelo.
La "nieta de la Orquídea", como llamaban cariñosamente a Lara Álvarez en su barrio de Gijón, dice mucho de la importante presencia que tuvo la abuela de la presentadora en la vida de muchos. Regentaba una bonita y colorida floristería en la ciudad asturiana, uno de los lugares felices en la memoria de Lara Álvarez y de donde sacó la inspiración para homenajearla y llevarla en la piel. "De ahí mi tatuaje en la nuca", contó hace tiempo en televisión.
Muy concienciada con la salud mental y a favor de recurrir a ayuda psicológica para afrontar y superar preocupaciones, Lara Álvarez –que conducirá por primera vez los especiales de Navidad de Mediaset, junto a Joaquín Prat– se ha confesado sobre el proceso de duelo tras la muerte de su abuela hace siete años y de lo importante que fue hacer terapia para superar tanto dolor. "Lo mío fue más un duelo personal por el fallecimiento de mi abuela. Fue algo más vinculado a lo emocional y al desbarajuste que me supuso", cuenta en nuestras páginas.
La presentadora de realities, que también es imagen de la firma de calzado y complementos Carmela, asegura que aguanta muy bien la presión inherente a su trabajo en televisión, que tanto la exponen, también en la parcela que nada tiene que ver con el ámbito profesional. "Para mí, la fama o la exposición pública, lejos de generar un problema o ansiedad, es todo lo contrario. Mi trabajo vive de esto, de que la audiencia quiere ver mi programa", afirma, subrayando que, cuando ha necesitado ayuda psicológica, en su caso, ha sido por un tema personal, en concreto, con esa despedida para la que no estaba preparada y que relaciona con "los momentos más complicados". "Es cuando más me acuerdo de ella", ha llegado a manifestar.