Pepe Navarro acaba de reabrir el caso sobre la paternidad del hijo de Ivonne Reyes con una rotunda afirmación: “No soy el padre del hijo de Ivonne. No hay ninguna prueba que pueda demostrar que lo soy”, exclama. Niega así la sentencia que le señala como padre desde junio de 2010 y que le obliga a pagar una pensión mensual de 800 euros al joven. ¿Tiene Pepe Navarro algún indicio en el que apoyar estas afirmaciones? Según ha podido saber Lecturas en rigurosa exclusiva, Pepe Navarro sí lo tendría.
Un test al margen de la ley
El presentador se ha hecho una prueba de paternidad –no concluyente, ya que no la ha ordenado un juez– pero cuyo resultado le ha dado alas a pedir una prueba de paternidad oficial. Sin embargo, Ivonne se niega en rotundo a que se coteje el ADN de Navarro con el de su hijo, pues ya existe una sentencia en firme que lo declaró como padre. Navarro no va a parar hasta que el caso vuelva a los tribunales: “Un ser humano tiene derecho a saber quién es su padre y su origen, y yo me ofrezco para ello”.
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