Todo ha empezado por un simple bocadillo de chorizo, que al final no era de chorizo sino de salchichón. Con el glamur que asociamos a las estilistas de ‘Cámabiame’, estas hoy han discutido por este embutido.
Ante Pelayo, Natalia y Cristina se presentaba Alba, una granadina que había superado dos trastornos alimenticios. Ahora parecía estar curada y alegaba que todo había sido gracias a la dieta vegana que mantiene desde hace un año. Ferviú, que es una gran defensora de los animales, ha dicho que todo el mundo debería aprender un poco más de la joven y de su conciencia social. Cristina ha saltado como un resorte y le ha espetado “¡pues buenos bocadillos de chorizo te comes tú!”. Natalia ha aclarado que no son de chorizo, sino de salchichón, algo por lo que siente verdadera debilidad… El dramazo de proporciones ÉPICAS estaba servido.
Ferviú ha confesado haberse sentido de lo más dolida y traicionada por este comentario de su compañera, y ha contado a todos que el tema de la alimentación vegetariana es algo que le encantaría cumplir, pero que se reconoce incapaz porque adora esta chacina. “Desde hace un tiempo ya no como filetes de carne, pero los bocadillos de salchichón…”. Chica, cada uno tenemos nuestras debilidades. Rodríguez le ha aclarado que no conocía su trayectoria ‘pseudo-vegetariana’, ni lo complicado que le estaba resultando hacer la transición. También le ha recordado que ella no es tan maquiavélica para decir una cosa que le pueda herir, sabiendo la gran conciencia animalista que tiene su compañera.
Y al final, todas tan amigas, pidiéndose perdón y aprendiendo que no hay nada mejor que respetar los hábitos de cada uno. Eso sí, hemos echado en falta una cosa: un buen bocadillo de salchichón que sirva de pipa de la paz.