Pedro Piqueras (67 años) ha sido el último protagonista de 'Planeta Calleja' y ha abierto su corazón como pocas veces. Amante de la música, de hecho fue cantante, apasionado de la comunicación y el periodismo y un hombre que intenta mantener su vida de forma discreta cuando las cámaras de Informativos Telecinco se apagan, el periodista ha hablado con Jesús Calleja de la relación con su único hijo.
Durante su viaje juntos a La Palma, Pedro Piqueras y Jesús Calleja han compartido varias confesiones. Calleja no ha dudado en preguntarle al presentador de informativos por su vida personal, algo de lo que jamás habla. "No sé si estás casado, si tienes hijos...", le ha planteado. Pedro Piqueras se ha sentido cómodo y ha dado algunas pinceladas sobre cómo está su corazón.
"No es no quiera que nadie sepa nada, intento proteger a las personas que están conmigo. Todos los que llevamos en esto mucho tiempo hemos establecido ese tipo de muro", ha empezado contando. Tras esto ha contado: "Bueno, yo estuve casado -con Ana, la madre de su único hijo- y ahora tengo otro tipo de relación no matrimonial".
Pedro Piqueras no ha querido mencionar a Esther Barriga, su segunda pareja y con la que comparte su vida. Esther es licenciada en Farmacia y Veterinaria. Ambos tienen una vida discreta y al margen de los focos y comparten aficiones, como la vida activa, la música o la gastronomía. Viven tranquilos y felices en la intimidad. Piqueras no ha querido hablar más ni ir más allá.
"A mis amigos tampoco los conoce nadie, hablo de mis amigos de Albacete de toda la vida. A ellos ni les importa si soy o no conocido, si tengo un trabajo público o no público y hablamos de las mismas chorradas de siempre", ha contado. Para el periodista abrir su corazón así y visitar el programa de aventuras y entrevistas es "todo un acontecimiento", porque siempre mantiene su vida personal al margen de su trabajo.
Piqueras habla como nunca antes de su relación con su hijo, Curro
Pedro Piqueras no piensa en la jubilación. "Cada vez que lo pienso me da pereza hacerlo porque tengo la fortuna de trabajar en algo que me gusta. Me tendrían que echar casi para que me jubilara", ha contado. El periodista dice que es "de guateque y de hablar" más que de salir de noche y que en su vida sí se ha divertido pero "no demasiado". "Estoy contento de las cosas que he hecho en la vida, no me arrepiento de nada", ha empezado contando.
Eso sí, ha lamentado muchas cosas que se ha perdido por trabajar. "No me arrepiento de lo que he hecho, quizás me arrepiento de lo que no he hecho. En el trabajo me faltó ser corresponsal en un país extranjero, me hubiese encantado, y luego hay otras cosas que te pierdes cuando sales a las diez la noche todos los días", ha empezado contando.
"Por ejemplo, el primer plato de cualquier cena, porque cuando llegas todos los amigos están ya casi en el postre, ir al cine un jueves por la tarde... A mi hijo no le he criado, es verdad. Recuerdo que yo tenía el horario de madrugada y me levantaba a las ocho de la tarde para estar con él un rato y me iba a las 11 de la noche a trabajar después de que él se hubiera acostado. Volvía a las 10 de la mañana.
Recuerdo una anécdota cuando estábamos haciendo una obra en casa porque se rompió una tubería y mi hijo le dijo al albañil 'eso es trabajar y no como mi padre que se pasa el día durmiendo'. Claro que te pierdes cosas, pero nunca me lo ha echado en cara. Tengo un hijo maravilloso", ha explicado el presentador de Informativos Telecinco.
Ahora Curro tiene 38 años y es el gran orgullo de su padre. "Nunca me lo ha echado en cara porque los días que he tenido los he vivido intensamente con él, incluso cuando me separé tenía la posibilidad de verlo todos los días y hubo una época que trabajaba por la mañana y lo recogía del colegio".