Paz Padilla se deshace en halagos con su hija, Anna Ferrer: "Se ha crecido en la adversidad"

Paz Padilla no lo puede evitar. Se le cae la baba con Anna Ferrer y está tremendamente orgullosa de la actitud que ha demostrado su hija tras hacer frente a multitud de baches

Redacción

Lecturas.com

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Gtres

Paz Padilla y Anna Ferrer están más unidas que nunca. La influencer ha sido uno de los apoyos más importantes de la presentadora de Sálvame después de hacer frente a su año más trágico: "Eres fuerte como el roble, segura, inteligente, atrevida, cariñosa y, sobre todo, grande, muy grande", escribía Paz en su perfil de Instagram por el 24 cumpleaños de su hija... La gaditana no puede estar más orgullosa de la mujer en la que se ha convertido la joven y, en el plató de Mediaset y más emocionada que nunca, ha destapado la actitud tan valiente con la que Anna se enfrentó a la muerte de Antonio Juan Vidal.

Paz Padilla ha vuelto a dejar con los pelos de punta a los espectadores del programa confesando el amor que sentía, que siente y que sentirá por el abogado: "Tengo muy claro que lloraré toda la vida. Se me ha ido el amor de mi vida, voy a estar enamorada siempre, ese amor va a ser difícil que desaparezca", ha comenzado la empresaria con un nudo en el pecho.

Tras esta nueva declaración de amor, Paz Padilla se ha mostrado tremendamente orgullosa de la madurez que ha demostrado Anna Ferrer ante situaciones tan tristes: "Anna me apoyaba pero yo sé que le dolía. Ella ha madurado en todo este proceso, se ha crecido en la adversidad. Se parecía mucho a Antonio, cuando yo discutía con ella, él mediaba”.

El 2020 ha sido el año más convulso para la familia pero Paz y Anna están sanando las heridas. Ambas se han refugiado en el trabajo y han lanzado su nueva colección de No ni na... ¡Y está siendo todo un éxito!

Anna, más fuerte que nunca por su madre

Anna Ferrer ha contando en multitud de ocasiones que lo ha pasado muy mal viendo a su madre tan hundida y en Sábado Deluxe no dudó ni un segundo en dejar sus sentimientos al descubierto: "Nunca he visto a mi madre llorar tantísimo. Me dolía escucharla pero me ha enseñado muchísimo, ha sido una lección. Me he dedicado a pasar mi propio luto, Antonio Juan está muy pendiente de mí y muy orgulloso, era muy bueno".