La ruptura matrimonial de Enrique Ponce y Paloma Cuevas, es un hecho, sobre todo, después de que se hiciera pública el pasado viernes la primera imagen conjunta del torero y la joven Ana Soria, con quien, supuestamente, estaría viviendo un romance. Su matrimonio es historia, tal como ha quedado reflejado en el comunicado oficial que han difundido a través de redes sociales y con el que han querido aclarar en qué punto se encuentra el último capítulo de una historia de amor de más de veinticuatro años y dos hijas en común.
Así es, después de comprobar "la repercusión mediática" que ha causado su separación, Enrique Ponce y Paloma Cuevas han querido zanjar los rumores a golpe de "comunicado oficial", firmado por ambos. Se trata, posiblemente, del último gesto conjunto y público de la expareja. Ha sido el periodista Aurelio Manzano quien lo ha difundido a través de su cuenta de Twitter. "Viendo la repercusión mediática que estamos teniendo en los últimos días, queremos manifestar que nos encontramos en trámites de separación de hecho", han confirmado.
Enrique y Paloma han querido dejar claro en el documento que "ha sido una decisión muy meditada, tomada de mutuo acuerdo, y desde el profundo cariño y respeto mutuo que nos tenemos, y que hemos demostrado durante todo nuestro matrimonio". Asimismo, han matizado el motivo por el que han decidido romper su silencio: "El único fin de hacerlo público es para proteger a nuestro entorno familiar, y en especial a nuestras dos hijas menores de edad".
Lo más importante, sus hijas
El matrimonio llevaría casi un año en crisis, pero sin separarse ni legalmente ni físicamente, pues pasaron el confinamiento juntos en su finca Cetrina, en la localidad jienense de Navas de San Juan. Además, siguen residiendo en el hogar familiar del madrileño barrio de Los Rosales, donde viven junto a sus dos hijas, Paloma y Bianca, de 12 y 8 años, respectivamente y, según informa LOC, estaban construyéndose un chalet en la exclusiva urbanización de La Finca.
![Comunicado Enrique Ponce y Paloma Cuevas](data:image/svg+xml,%3Csvg xmlns="http://www.w3.org/2000/svg" viewBox="0 0 884 1086"%3E%3C/svg%3E)
Paloma Cuevas ha optado por una actitud discreta y elegante pese a ver cómo su matrimonio de 24 años se desmoronaba en los últimos meses. Su prioridad es el bienestar de sus hijas, algo en lo que Enrique Ponce está totalmente de acuerdo.
El matrimonio no estaba pasando una buena racha, no ya solo como pareja, sino también a nivel familiar y personal. Paloma perdió a su único hermano varón en 2014, a causa de un infarto, un durísimo golpe del que la familia aún no se ha repuesto. Enrique, por su parte, sufrió una cogida tremenda el año pasado que le destrozó la rodilla y que casi le deja imposibilitado para volver a los ruedos.