Este fin de semana se ha celebrado la primera comunión del hijo en común de Kiko Rivera y Jessica Bueno. Una celebración no exenta de polémica después de comprobar que faltaban rostros de la familia Rivera Pantoja. Una sorpresa mayúscula de la que, un día después del encuentro familiar, presumiblemente idílico, han tenido que salir al paso tanto Kiko Rivera y Jessica Bueno. Han sido las lágrimas de Anabel Pantoja las que han destapado las divergencias entre los padres del protagonista del día, y han acabado destapando ciertas divergencias en el fondo y la manera de organizar la celebración.
"No pienso en mí, pienso en mi hijo, en su bienestar y en su felicidad", las palabras de Kiko Rivera resumen a la perfección el 'pacto' al que ha llegado con Jessica Bueno. Nada importaba más que la persona más importante que tienen en común disfrutara de un día perfecto. El hijo de Isabel Pantoja ha deslizado que "no estoy conforme con algunas cosas" de lo que sucedió durante la primera comunión de su hijo mayor. "Sabes que yo llevo ocho años aceptando una serie de cosas que he decidido aceptar por el bien de mi hijo", se justificaba ante su prima Anabel Pantoja, que no podía contener el llanto en el plató de 'Sálvame' después de haber sido excluida de ese día tan especial. Cabe señalar que la colaboradora televisiva fue elegida hace años la madrina del pequeño, y se ha dedicado a ello con pasión.
La primera comunión ha tenido lugar en Bilbao y hasta allí viajó Kiko Rivera junto a Irene Rosales y sus dos hijas pequeñas. "He estado allí con ellas aceptando algo que no veía justo", subrayaba y hacía una promesa a su prima, que ha sido también un puente tendido a su madre: "Ya le haremos nosotros una fiesta con su gente, su familia paterna, sus amiguitos. Y su abuela también estará invitada a venir, si quiere, por supuesto. (...) Le vas a poder dar un superabrazo. Está deseando verte a ti, a todos".
La respuesta de Jessica Bueno
Por su parte, Jessica Bueno también ha dado su versión de por qué se produjo de esta manera tan determinada la primera comunión de su hijo mayor, y por qué quedó fuera Anabel Pantoja y el resto de la familia paterna. "He organizado una fiesta en mi casa donde hemos sido los únicos responsables en todos los aspectos. Y por respeto y amor hacia mi hijo, han estado las personas que creía convenientes y que tienen trato directo con él. Por supuesto, no podía faltar su padre, su esposa y sus hermanas. Creo que estoy en mi derecho de poder invitarles solo a ellos, ya que son los principales en la vida de mi hijo (...). Uno de los regalos de comunión era el de otra celebración en Sevilla con su familia paterna, cosa que creo lógico, dado que esta ha hice pensando en mis dos hijos. Yo no tengo nada que ver. Mi única responsabilidad en ese aspecto era la de elegir una madrina". Finalmente, tras aclarar que se trató de "una celebración íntima con veinte invitados", se ha lamentado por considerar que todo ha acabado derivando "en un circo".