Pablo Motos ha vivido una de sus entrevistas más surrealistas y a la vez divertida. El presentador ha entrevistado este martes en 'El Hormiguero' a Valentina Zenere después de su incorporación como nuevo fichaje de la próxima temporada de la serie de Netflix. La actriz, pareja del empresario catalán Jordi Lladó, ha dejado a todos en shock con las confesiones que ha hecho tanto sobre ella misma como sobre el rodaje de la serie 'Élite', en especial sobre las escenas íntimas de la ficción de Netflix.
Valentina Zenere ha hablado de lo "loco" que ha sido su salto de Disney Chanel a Élite. Entre risas ha contado que en Disney paraban en seco la grabación si se le veía un poco de sujetador y de ahí a grabar escenas muy subidas de tono en 'Élite'. Grabaciones para las que tuvo que prepararse mucho mentalmente. O no tanto. Valentina ha dejado descolocadísimo a Pablo Motos al confesar que acudió borracha al rodaje de su primera escena íntima.
"En el tercer capítulo había una escena de sexo en un coche. Hablé con mis amigas de Argentina y les dije que me tomaría unas copas antes de ir a grabar. El estado me duró todo el rodaje pero no quedaba mal porque entraba dentro de la escena. Era de más loba", ha explicado. A lo que ha añadido: "¡Claro que lo notaron! No he visto esa secuencia, me da mucho pudor".
Pero las confesiones de Valentina no han quedado ahí. La actriz ha contado que para estas escenas los actores se ponen una pelota de goma para que no haya contacto físico. "Estamos cómodos en todo momento", ha asegurado mientras Pablo Motos no podía dejar de bromear sobre la situación con Trancas y Barrancas. La actriz ha destacado la función del "coach de intimidad" de la serie de Netflix: "Es una persona que pacta entre el actor y el director las cosas que sí quieres o no quieres que se vean, pones tus límites. Luego esta persona se lo comunica al director y se hace un ensayo, con un equipo reducido en el set, para plantear toda la escena. Está todo muy cuidado".
La fama de Valentina Zenere crece como la espuma y además de su salto en Netflix se ha lanzado al mundo de la música con un nuevo single musical. Un excelente momento profesional que se suma a la estabilidad de su relación con Jordi Lladó. El novio de Valentina Zenere es hijo de Jordi Pujol y de la diseñadora de interiores María Lladó, y nieto de José Lladó, quien fuera ministro en España. Dos familias influyentes en Cataluña que se traduce en que esté muy bien posicionado económicamente. Ahora disfruta de su éxito como empresario, y también del amor con la belleza argentina.