Quien le iba a decir a Raphael que el concierto en el que festejaba 60 años encima de los escenarios derivaría en un aluvión de indignación en redes sociales por haber reunido a 5.000 personas en plena pandemia en un espacio cerrado como es el Wizink Center de Madrid y cuando se están limitando las reuniones familiares a seis personas en Navidad. Entre tantas críticas ha habido varias caras conocidas que han querido dar la cara por el veterano artista, entre ellos, Pablo López.
El cantante malagueño, que había sido invitado por Raphael al concierto, estaba siendo entrevistado por Cristina Pardo en La Sexta cuando se apresuró a defender a su compañero de profesión: "Pude comprobar cómo todo el mundo se respeta y es feliz sin tener que hipotecar la felicidad del otro", alegaba a la vez que reconocía que todo se había llevado a cabo con una exquisita organización: "Todo lo que vi fue seguridad y respeto. Se mantuvo en todo momento la distancia de seguridad y la gente de seguridad hace un trabajo impecable", sentenciaba.
Cansado de este tipo de situaciones que dañan tanto al mundo de la cultura, Pablo López ha zanjado el tema con una sonada reflexión: "Todos deberíamos intentar ser un poco más tolerantes con la lucha de muchos sectores mientras se hagan todas las cosas bien".
Raphael emite un comunicado
Este mismo lunes, Raphael se ha adelantado y ha hecho público un comunicado a través de su perfil de Instagram en el que agradece el apoyo a él mismo y en especial a la cultura "en ‘jaque mate’ desde el inicio de la pandemia". En un texto cargado de emoción, el artista ha querido dejar claro que su única intención fue "recuperar la música en directo" en estos momentos tan complicados: "Hemos trabajado muy duro para ofrecer un concierto con las más estrictas medidas de seguridad, prevención y, por supuesto, cumpliendo la normativa vigente".