La 'Toñomanía' superó con creces las expectativas de Belén Esteban y de sus invitados. La colaboradora de Telecinco se rodeó de todos los suyos este miércoles por la noche en la sala Teatro Kapital. La victoria en los juzgados sobre Toño Sanchís después de dos años y cuatro meses de una auténtica batalla de desgaste le ha dado tranquilidad y, sin exagerar, un estado de plenitud personal cercana al nirvana. Aunque lo que hubo durante el fiestón de la Esteban fue un derroche de emociones y euforia gracias al otro acontecimiento que se moría por celebrar la protagonista de la noche. Y es que el equipo de sus amores ganó la Europa League.
Belén Esteban tiene el corazón rojiblanco y es colchonera hasta la médula. Esta misma noche, el Atlético de Madrid de Simeone jugaba la final de la competición europea y se hizo con el triunfo con contundencia al asestarle tres tantos al Olympique de Marsella.
La sala Kapital habilitó una pantalla gigante donde los invitados, especialmente la de San Blas, pudo seguir en todo momento cómo transcurría el partido en Lyon. La 'Toñomanía' vivió uno de sus puntos álgidos con el pitido final del árbitro y no hizo falta partir entre vítores hacia la estatua de Neptuno y trasladar la fiesta organizada por Belén, porque la que se montó fue de pura épica. La tertuliana de 'Sálvame' estaba que no cabía en sí de gozo con este 'regalo' que, como hincha colchonera, le estaba haciendo su equipo en el mismo momento en el que ella compartía una de las experiencias más significativas de su vida.
Como se ha visto en los 'stories' que han compartido los invitados, la de Paracuellos de Jarama se animaba incluso a subir al escenario con la pantalla gigante sobre la que se proyectaban las imágenes de los jugadores del equipo de Simeone extasiados por el triunfo. Haciendo el símbolo de la victoria, bailó y cantó el himno del club como si le fuera la vida en ello. Definitivamente, Belén vivió su noche más dulce y apoteósica.
Otra colchonera por cuyas venas también corren los colores del Atlético de Madrid es Ana Rosa Quintana, quien ha hecho todo el programa de este jueves con la bufanda del equipo sobre sus hombros. La reina de las mañanas de Telecinco estaba "eufórica" y ha reconocido que “estuve a punto de ir a Neptuno”.