“Desde siempre ella ha sido muy indiferente con ellos”. Esa ‘ella’ es Rocío Carrasco, y esos ‘ellos’ son Gloria Camila y José Fernando; y quien lo ha dicho es José Ortega Cano.
Una de las afirmaciones más duras que le hemos escuchado al último marido de Rocío Jurado y que están cargadas de decepción. Decepción por lo que pudo haber sido y parece que jamás será. A él le hubiera gustado que todos fueran una gran familia feliz, la hija que Jurado tuvo con Pedro Carrasco y los dos pequeños que adoptaron. Pero ella, según cuenta Ortega, jamás sintió ese apego por los que son sus hermanos.
Después de la entrevista exclusiva que Antonio David ha concedido a Lecturas, en la que afirmó que su exmujer ha “despreciado” a sus propios hijos, Ortega Cano hablaba al respecto a los micrófonos de AR. Sobre Ro y David el extorero y empresario no quería opinar, no deseaba mojarse, pero no ha podido contenerse cuando le han preguntado si él había sentido eso mismo con sus hijos. Ahí le habían dado en la fibra, y no ha podido callarse lo que ya se venía sospechando tras las declaraciones de la joven Gloria Camila. Ha tachado de "indiferente" el comportamiento de esta con ellos.
“No pasa nada, cada uno vive su vida”, finiquitaba diciendo, sin querer echar más leña al fuego que ya parecía lo bastante avivado. Tampoco ha querido entrar a comentar si es cierto que Carrasco ha interpuesto acciones legales con Gloria. De momento guarda silencio al respecto y solo tiene claro una cosa: seguirá defendiendo a sus hijos a capa y espada.