"Tras meditarlo mucho con mi familia, hablarlo y valorarlo detenidamente con mi entrenadora, y posteriormente con el resto del equipo, he decidido que en este momento quiero dar un paso a un lado". Con estas palabras ha anunciado Ona Carbonell su retirada del deporte. La nadadora de natación sincronizada, con más de una veintena de medallas en su palmarés, no estará en los juegos de Tokyo del 2020 porque ahora sus prioridades son otras, quiere estar con su familia y ampliarla.
"Como mujer y deportista, conciliar mi vida profesional con la personal implica asumir decisiones como esta y dejar el deporte a un lado temporalmente, sin que esto signifique que vaya a renunciar a mi carrera como nadadora", ha afirmado en el escrito.
Ona, quien sorprendiera a todos con su participación en la tercera edición de 'Masterchef Celebrity', que ganó, tiene 29 años y mantiene una sólida relación con Pablo Ibáñez con quien comparte la pasión por el deporte, ya que él es ex gimnasta de la Selección. Ona Carbonell y él se conocieron en el centro de alto rendimiento de Sant Cugat al que acudían a entrenar desde que eran niños.
"No os podéis ni imaginar lo que me cuesta dar este paso ahora, pero creo que tengo que ser honesta conmigo misma, y por supuesto con mis entrenadoras y compañeras de selección, y aceptar que mi cabeza y corazón me piden más tiempo para mí y para mi familia", ha contado la nadadora, que aunque está convencida de que esta noticia "puede sorprender", sobre todo a las puertas de un nuevo reto olímpico, está convencida y segura de su decisión. "Me hallo en una situación personal diferente a otros años", ha dicho.