Los lunes son noches de ‘OT 2023’. El ritmo frenético al que nos están acostumbrando continúa su curso y cada semana hay que decir adiós a un nuevo concursante que se ve obligado a abandonar su sueño de permanecer en la famosa Academia con un aprendizaje increíble. Esta semana ha sido el turno de Omar que ha perdido el duelo de la nominación frente a Álex Márquez con un 72,4% de los votos.
Aunque no lo parezca las semanas van pasando y ya nos encontramos en la tercera gala de ‘Operación Triunfo’. Además, la semana pasada se vivió uno de los momentos más complicados, como fue la primera expulsión del concurso. Suzete tuvo que decir adiós convirtiéndose en la primera expulsada, aquella que es una de las que más duelen porque apenas han tenido tiempo de demostrar su talento.
Omar, segundo expulsado de ‘OT 2023’
Los primeros en actuar en esta noche han sido los dos nominados para que así la audiencia pudiese tener más tiempo de decantarse por las dos opciones de que disponían. Tras ellos han tenido tiempo de demostrar todo lo que han aprendido durante esta semana el resto de participantes, que se jugaban su nominación y el hecho de tener una semana tranquila, dentro de lo que cabe sin la sombra de la expulsión.
A la finalización de todas las actuaciones se han cerrado las líneas telefónicas para poder elegir al concursante nominado que querían que permaneciese en la academia. Así que Chenoa (48 años) ha sido la encargada de comunicar que con el 72,4% de los votos el elegido era el cordobés Álex. De este modo, Omar se convertía en el segundo expulsado del programa y tenía que despedirse de su gran amigo con un sentimiento agridulce.
Ha sido una semana de lo más complicada para los dos nominados, ya que ambos han congeniado a la perfección y hace mucho más duro el momento de la expulsión y el de salvación. Tanto ha sido así que por un momento y viendo las imágenes del programa, no se sabía quién había sido el salvado de los dos, ya que Álex lloraba más que Omar, el expulsado definitivo.
En cualquier caso, los dos salieron al escenario con las ganas de darlo todo y luchar por su puesto en la Academia. Primero fue Omar el que cantó La canción más hermosa del mundo, una versión particular de la mítica de Joaquín Sabina. Por su parte, Márquez se atrevía a versionar Ladrona de la banda Morat, donde además de demostrar su potencial vocal también le ha servido para abrir sus sentimientos sobre el escenario.