Si para la boda de Belén Esteban queda poco, para la de Pilar Rubio y Sergio Ramos queda menos que nada. Los padres de tres niños se casan el 15 de junio en Sevilla y, antes del gran día, han compartido importantes y suculentos detalles.
Sergio, Marco y Alejandro, sus hijos, tendrán un papel destacado: además de ser los pajes, se encargarán de llevar los anillos de sus padres. El enlace tendrá lugar en un imponente lugar, la Catedral de Sevilla. De hecho, Sergio se ha bautizado hace poco para poder llevar a cabo la ceremonia con la que siempre soñó.
Pilar, que dice que será una novia atípica a la hora de escoger su vestido, tal y como confiesa a Telva, sí conservará la tradición de que sea su padre quien la acompañe al altar. En este camino sus tres niños la seguirán muy de cerca.
A pesar de confirmar que, en efecto, en su boda, como en la de Belén, no habrá sitio para los móviles, y serán dejados al comienzo de la fiesta en una consigna, “para que todo el mundo se lo pueda pasar bien sin miedo a ser grabados”, no confirma quiénes serán las sorpresas musicales que han preparado. Los gustos de los novios, que son tan diferentes, habían llevado a pensar que habría actuaciones de flamenco y conciertazo de rock, es más, hasta se dijo que grandes bandas como AC/DC o Aerosmith habían sido contactadas por los novios para la gran fiesta. De esto no han dicho ni mu.
En esa fiesta, que se las promete antológica, faltarán algunos amigos importantes y muy célebres de Sergio como Alejandro Sanz, que se tendrá que ausentar porque ese día tiene concierto. ¡Ah! El deber manda.