Nuevos datos en la historia del torero Juan Ortega y su novia Carmen Otte

Desde que el torero Juan Ortega decidiese plantar a su novia Carmen Otte en el altar a media hora de celebrar su boda, el goteo de informaciones ha sido constante

JC
José Confuso

Director digital de Lecturas

Juan Ortega
GTRES

Nada es lo que parece. La opinión pública se conmocionaba al conocer la historia del torero Juan Ortega y su pareja, la doctora Carmen Otte. Popular en el mundo taurino pero no en la crónica social -a diferencia de otros toreros más mediáticos-, Ortega saltaba a la actualidad al decidir cancelar su boda tan solo media hora antes de que esta se celebrase. El diestro plantaba a su novia en el altar y dejaba a sus 500 invitados sin explicación ni respuesta a las puertas de la iglesia. ¿Qué había ocurrido? ¿Por qué había decidido tirarlo todo por la borda? Desde entonces, el goteo de información ha sido constante. Dudas iniciales, tres llamadas clave, posibilidades de una reconciliación, todo está en el aire.

La pareja, tal y como deslizaba parte de su círculo, está en shock. Era el periodista Juan del Val quien se convertía en improvisado portavoz de Ortega. Amigo del torero e invitado a la boda, confesaba como se encuentra después de este escándalo. Personas del entorno de Carmen Otte señalaban que la novia estaba en shock y tratando de asimilar todo lo que había ocurrido. De la noche a la mañana se han visto en boca de todos. Pero, claro, poco a poco nuevos detalles han ido saliendo a la luz. ¿Y si la conmoción no era tanta? ¿Y si el enlace llevaba meses pendiendo de un hilo? Un nuevo testimonio, recogido por el portal 'Vanitatis', ha vuelto a dar un nuevo giro a esta ya de por sí rocambolesca historia.

El último giro entre Juan Ortega y su pareja Carmen Otte

Hasta ahora se había señalado a las dudas de Juan Ortega como motivo para cancelar la boda a última hora. El torero, según se ha publicado, habría sufrido una enorme presión por parte de su familia política para formalizar el matrimonio. Sin estar convencido del todo en dar el paso, Ortega habría seguido con los preparativos de la boda hasta llegar a un punto de no retorno. Profundamente religioso, el torero no se vio capaz de comprometerse a los ojos de Dios cuando en su interior no veía razón para hacerlo. El diestro llamó a su cura de confianza, el mismo que iba a oficiar el enlace al parecer, para expresarle sus pensamientos. Acto seguido canceló la boda.

“Juan no quería casarse y Carmen lo sabía", asegura el citado portal. Una persona de su entorno desvela que el torero llevaba tiempo expresando las dudas que sentía a su pareja. Era una posibilidad que estaba en la mesa. De hecho, según esta misma versión, después de un reciente viaje Ortega decidió pararlo todo. Finalmente continuaron con el enlace. Al parecer, el torero pasó el día antes de la boda llorando, hecho un mar de miedos y temores. La decisión estaba más que tomada pero no fue capaz de comunicarla hasta el día de la boda.

“Juan no se ha implicado en los preparativos de la boda porque nunca estuvo convencido de dar ese paso, aunque continuó adelante y quizás debería haberlo parado antes, pero cada persona es de una manera…”, apuntan al citado medio. Fue Carmen quien tuvo que llamarle porque días antes se encontraba entrenando y sin involucrarse en el que iba a ser el día más importante de su vida sentimental.

Carmen Otte conocía el secreto de Juan Ortega

Según esta versión, que todo apunta a que viene de parte del entorno de Ortega, la novia conocía que Juan no quería casarse. Sin duda, el golpe fue igualmente duro. El torero habló con el párroco, tomó la decisión y la comunicó. En este punto existen versiones distintas. Unos apuntan a que fue él mismo quien llamó a su novia y a sus padres. Otros indican que encargó a unos amigos que fuesen los que le diesen la noticia a Carmen Otte. Sea como fuere, el revés hizo estallar la ceremonia. Los invitados se encontraban ya en el templo y tuvieron que ser avisados tanto por mensaje como a través de unas amigas de la médico.

Acto seguido, el torero hizo las maletas y se marchó. Según se ha asegurado, se encuentra actualmente en casa de sus padres. Allí se habría refugiado hasta que pase la tormenta mediática. Otte, por su parte, está muy afectada. No quiere formar parte de la actualidad y pretende pasar desapercibida hasta que baje el interés. Por el momento, ninguno de los dos ha roto su silencio ni dado explicaciones sobre su estado y los motivos que les llevaron a esta situación. La historia parece que va a continuar.