Por el momento, Pepe Navarro no va a poder descansar de los quebraderos de cabeza derivados de su divorcio de Lorena Aznar y, en particular, de la venta del dúplex que ha sido hasta hace poco el domicilio familiar de la expareja y sus hijos. Según publica Vanitatis, el periodista ha contratado otra inmobiliaria para venderlo y su precio se ha incrementado un 7%. La cantidad de salida se marcó en 1.825.000 euros y ahora ha pasado a valer 1.950.000 euros, 125.000 euros más. Una circunstancia que pone más dificultades para venderlo.
El pasado abril, el juez daba la razón a Pepe Navarro. En la disputa abierta que el presentador mantiene con la que ha sido su pareja los últimos 15 años, la vivienda familiar ha sido uno de los temas candentes. Finalmente, la resolución de magistrado pasaba por que se vendiera el dúplex y la familia del presentador tuviera que buscar otro domicilio.
El juez daba dos meses a Lorena y a los menores para encontrar un nuevo hogar, cuyo alquiler correría a cargo de Navarro. Se fijaba entonces un precio máximo de 1.400 euros, como apuntaba Paloma García Pelayo desde 'El programa de Ana Rosa'.
La venta de este impresionante dúplex en pleno Paseo de la Castellana ha estado en el aire desde antes de la decisión de romper su matrimonio. De hecho, tal y como apuntaba Paloma Barrientos, la expareja de Pepe ha estado mostrándolo a los posibles compradores.
En un principio, se esperaba que su venta no resultara complicada, pues se suponía que ya había un comprador muy interesado; sin embargo, a estas alturas del año no habría aceptado finalmente las condiciones de Navarro. Si sumamos, además, el incremento que ha experimentado en su precio, no parece que vaya a tener las cosas fáciles para deshacerse de él. Recordemos que la decisión de deshacerse de este espectacular ático reside en la necesidad por parte del comunicador de poder hacer frente a sus deudas.
Este increíble inmueble es un dúplex con vistas al Paseo de la Castellana. Un apartamento de más de 300 metros cuadrados que la expareja del presentador se negaba a abandonar hasta que el juez no dictara sentencia.
La casa cuenta con dos amplias plantas -una de 171 metros cuadrados y la otra de 138-. En la primera se sitúa el hall, el salón, el comedor con salida a una de las terrazas, un dormitorio con baño y una cocina office. En la segunda, se encuentra el dormitorio principal, con baño, vestidos y salida a la otra terraza, otro dormitorio con baño y un cuarto para la plancha y lavadora.
La vivienda está profusamente decorada con muebles y complementos de lujo. Aunque, sin duda, su gran atractivo son las terrazas, desde las que se puede disfrutar de unas visitas inigualables del cielo de Madrid.