La boda de Belén Esteban con Fran Álvarez fue como ella siempre había soñado. La de Paracuellos dio el ‘sí quiero’ ante el altar, en una celebración religiosa, y rodeada de los suyos. Aunque todo salió a pedir de boca, el matrimonio acabó antes de que la muerte los separase. El divorcio acabó con ese amor plagado de altibajos, y Belén cerró uno de los capítulos más complicados de su vida. Ahora lo reabre por el mejor de los motivos, quiere casarse de nuevo y desea pedir la nulidad del anterior.
La madre de Andreíta estaría planeando una boda por la iglesia para ella y para Miguel, el hombre que le ha devuelto la esperanza en el amor. En La Razón, Belén reconoce que hay planes matrimoniales en su futuro “pero hay cosas que solucionar”, refiriéndose a la nulidad.
De su anterior ‘sí, quiero’ han pasado 8 años, y la vida de la colaboradora no podría ser más diferente. Ahora está completamente sana y en ella todo se ha transformado. Es una mujer renovada y esto podría jugar a su favor, según opina Kiko Hernández, “(cuando se casaron) tanto Belén como Fran estaban mal” contó en ‘Sálvame’ haciendo referencia a la salud de ambos, un tema del que Belén ha hablado abiertamente.
Conseguir la nulidad significaría que los dos enamorados podrían unirse en sagrado matrimonio, como parece que es el deseo de la pareja. El lugar escogido podría ser una parroquia del municipio en el que han establecido su domicilio. Sería en la iglesia de San Vicente Mártir. Y de fechas aún no hay nada pensado, aunque creen que el próximo año podría ser el idóneo.
Ella ya sabemos que desea la nulidad, pero ¿y la otra parte? ¿qué opina de todo esto Fran Álvarez? El camarero lo tiene clarísimo y no piensa poner ninguna traba a su exmujer, es más, le dará “todo tipo de facilidades”. “Le deseo felicidad, en mi cabeza no está oponerme a la anulación, sino todo lo contrario”, ha asegurado a la prensa.