Nuevo disgusto para Carla Vigo: la sobrina de Letizia pide ayuda para encontrar a su mascota perdida

La actriz, una gran amante de los animales, está desolada por la pérdida de su 'bebé', que responde al nombre de Molly

Montse Jolis
Montse Jolis

Periodista especializada en corazón y sociedad

Carla Vigo
Gtres

No está Carla Vigo (22 años) atravesando la mejor época de su vida. A punto de cumplir 23 años –los hará el próximo viernes 13–, la sobrina de la reina Letizia está que no levanta cabeza en los últimos meses. El último disgusto ha sido la pérdida de su mascota, un loro hembra –Carla se refiere al animal en femenino– que se llama Molly y que, por lo que explica, salió volando por la ventana en un despiste de su dueña. Carla no ha dudado en recurrir a las redes sociales para pedir ayuda y recuperar a su querida ave.

Perdida en la zona sur de Madrid

"Se ha perdido mi bebé, salió por la ventana en San Fermín-Orcasur, por donde el metro de Sanfer [San Fermín]. Si alguien la ve que me escriba, por favor. Responde al nombre de MOLLY", ha publicado Carla en sus redes sociales.

Carla Vigo

Molly, el loro que ha perdido Carla Vigo.

Instagram @just__carlaaa

 

Depresión, bulimia, sin trabajo y ahora lo de su mascota

La pérdida de Molly viene a sumarse al cúmulo de desgracias que está sufriendo Carla Vigo en los últimos tiempos. El pasado mes de febrero, la sobrina de Letizia confesó que padecía depresión. Poco después, fue ingresada de urgencia en el hospital porque, según reveló ella misma, padecía episodios de bulimia. Este trastorno alimenticio no era para ella algo nuevo. "Empecé a verme mal. A los 14 años empecé a hacer cosas perjudiciales para mí, pero fue con ocho o nueve años cuando comencé a verme mal en el espejo", es decir, que todo empezó cuando era una niña. Carla perdió a su madre, Érika Ortiz –hermana menor de Letizia y Telma– cuando solo tenía cinco años, un golpe que, pese a ser muy pequeña cuando se produjo el trágico suceso, le ha marcado de por vida.

"Era una niña y no sabía qué me estaba pasando. No lo supe identificar porque tampoco nadie me había hablado de ello. Es algo que te va a acompañar toda la vida, pero tienes épocas mejores", comentó Carla con respecto a la bulimia. Meses después, Carla volvió a ingresar en el hospital por sus problemas de salud. En ese momento, fue su abuela, Paloma Rocasolano, la que acudió al centro sanitario, muy preocupada por su nieta.

El tratamiento que sigue le impide trabajar con Amargo

A su delicada salud, el fallecimiento de un amigo muy cercano dejó consternada a Carla, una mujer muy sensible que, como es lógico, se vio muy afectada por la noticia. Y si hubo una buena noticia en estos meses fue la de su reencuentro con Rafa Amargo, con quien iba a trabajar de nuevo en el teatro en el montaje 'La cabeza de Salomé'. Pero esta buena noticia, que tenía a Carla muy ilusionada, se vino abajo cuando su salud, de nuevo, ha resultado ser un impedimento. Por lo que parece, el tratamiento que sigue tras sus ingresos hospitalarios, son incompatibles con los ensayos y las representaciones del montaje de Amargo.

 

Carla Vigo y Rafael Amargo

Carla iba a trabajar junto a Amargo en 'La cabeza de Salomé'.

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