Rodolfo Sancho (48 años) y Silvia Bronchalo (48 años) fueron padres juntos a los 18 años, tras conocerse y enamorarse cuando ambos estudiaban y se formaban para dedicarse a la interpretación. Su embarazo les cambió la vida a ambos pero también les hizo madurar a pasos agigantados; Daniel Sancho Bronchalo (29 años) llegó al mundo para colmarles de felicidad y unir sus vidas para siempre. "Mi padre tenía razón. Cuando vi la cara al niño, me hice un hombre", dijo Rodolfo en una de sus entrevistas. Al actor siempre se le ha llenado la boca hablando de su hijo, que ahora se ve en la peor de la situaciones en una cárcel de Tailandia tras confesar el crimen y descuartizamiento de un hombre, de Edwin Arrieta (44 años).
La relación de Rodolfo Sancho y Silvia Bronchalo duró 14 años, pero ambos vivieron su amor -y su paternidad- de manera muy discreta. Ambos además tomaron rumbos distintos, ya que si Rodolfo comenzó a trabajar como actor y a cosechar éxitos Silvia Bronchalo decidió abandonar su carrera como actriz para encauzar su vida laboral por un mundo totalmente diferente, el de las finanzas y la gestión de patrimonio.
Desde su separación y hasta este agosto de 2023 poco o nada se ha sabido de la relación de ambos, si era más sólida o menos, cercana o distante, y es que su hijo en común ya es un adulto de 29 años y hace años que ambos dejaron de tomar decisiones juntos por su bienestar y cuidado. No obstante, todo esto ha cambiado en apenas unas semanas. Rodolfo y Silvia se han reencontrado de la manera más dolorosa y por lo que más quieren en el mundo, su hijo.
La 'nueva oportunidad' de Rodolfo Sancho y Silvia Bronchalo
Rodolfo Sancho conoció a Silvia Bronchalo en 1993 en la escuela de interpretación. Fueron padres muy jóvenes -el 11 de junio de 1994 nació su único hijo, Daniel- y arrancaron sus carreras durante la década que compartieron, años en los que Rodolfo afianzó su fama. Su separación fue amistosa y tomaron caminos separados. De la vida personal de Silvia Bronchalo no sabemos nada. Rodolfo volvió a ser padre, en esta ocasión de una niña, que ahora tiene 8 años, junto a la actriz Xenia Tostado, su actual pareja y máximo apoyo en estos duros momentos.
A pesar de tomar caminos separados, Rodrigo y Silvia han vuelto a 'encontrarse' y se mantienen juntos ante la complicada situación de su hijo, para el que piden pena de muerte en Tailandia tras el crimen del médico colombiano Edwin Arrieta, que él mismo ha confesado. La policía tailandesa, que acaba de emitir su informe a la Fiscalía del país asiático, le acusa de asesinato premeditado y ha pedido para él la máxima pena, la capital.
Desde que se supo en los primeros días de agosto de este 2023 lo que había ocurrido con Daniel Sancho en Koh Phangan Rodolfo Sancho y Silvia Bronchalo se han unido de nuevo y han organizado la hoja de ruta a seguir a pesar de que, sobre sus pasos, están acostumbrándose a su nueva (y dura) realidad. En estas semanas ambos han lanzado varios comunicados, han mostrado su cercanía con la familia de la víctima Edwin Arrieta, han contratado un equipo de defensa para evitar que el joven sea condenado a pena de muerte y mientras que Silvia ha estado al lado de su hijo, con sus visitas diarias a la prisión de Koh Samui para apoyarle moralmente, el famoso actor ha estado realizando importante gestiones desde España antes de poner también rumbo a Tailandia. Previsiblemente, los padres de Daniel Sancho se turnarán para que el joven esté siempre acompañado y esta será una situación que durará años. Ahora son todo dudas y queda mucho camino por recorrer.
Rodolfo Sancho y Silvia Bronchalo tendrán que asumir un fuerte gasto juntos no solo en la defensa de su hijo sino también en viajes a Tailandia y alojamiento allí, además de los ingresos para que Daniel tenga una mejor calidad de vida en la cárcel. Y además tendrán que cambiar sus rutinas para encajar este apoyo al chef en Tailandia mientras cumplen con sus compromisos profesionales y también su vida personal en España, aunque ambas cosas para los dos están ahora mismo paralizadas. Sin duda, el reencuentro más doloroso para unos padres que se separaron hace casi dos décadas pero que ahora vuelven a estar unidos por la tragedia y, sobre todo, por el amor por su hijo.