La nueva vida de Alba Carrillo sin trabajar en televisión: analizamos su situación financiera

Alba Carrillo (36 años) protagonizó una de las salidas más abruptas de que se han producido últimamente en Mediaset, y no han sido pocas. Como era de esperar (al menos para esa parte de la audiencia que lleva años siguiendo a la modelo en televisión), ella no se va a mantener al margen de todo. Ya no le valen solo las redes para pronunciarse, ha ido un paso más allá. Ha buscado la manera de no depender de nadie, de poder hablar de todo y de todos siendo ella la que pone la línea roja de los temas en los quiere y en los que no quiere entrar. La plataforma elegida para poner en marcha en su proyecto es Twitch, y el primer programa tuvo lugar el pasado jueves día 15 de junio.

Presentó su nuevo proyecto completamente desnuda, toda una declaración de intenciones. Lo hizo a través de su cuenta de Instagram, acompañando la imagen del siguiente texto: "Me verás sin condiciones, sin filtros, sin mordazas. Mi espacio, mi lugar, mi redención’, y en el mismo post reveló revela el nombre del canal, ‘El salón del té'". Después de más de siete años dedicada sobre todo a la televisión, a nadie extraña que quiera continuar porque siempre ha dicho sentirse muy cómoda, pero ¿qué otras razones podría haber detrás de esta nueva iniciativa? ¿Puede Alba mantenerse durante un tiempo sin trabajar en la pequeña pantalla?

La economía de Alba Carrillo

La respuesta a la última pregunta es un rotundo sí. La modelo cuenta con setecientos cuarenta y nueve mil seguidores en Instagram, y sus años en pantalla han logrado que sea una cara muy reconocida y cercana. Sin duda, valores que las marcas consideran como favorables a la hora de contratar a alguien para hacer publicidad de sus productos. Ella, desde hace tiempo, hace colaboraciones puntuales, pero ahora, que tiene muchísimo más tiempo, puede incrementar el ritmo de trabajo en este sentido. Esto supondría un aumento en su cartera.

Lo que sí es seguro es que en octubre podremos descubrir una nueva faceta de Alba: la de escritora. La modelo publicará 'Lista para la vida'. "No sabéis lo que me he emocionado escribiendo este libro. Me he exprimido el alma y no dejo ningún tema sin tratar: amor, trabajo, familia, sexo… Había días que me iba a la cama y no podía dormir porque había estado escribiendo y tenía removidas las entrañas. Otros días, mi motor para levantarme era escribir y me daba la fuerza y la ilusión recordando cosas preciosas y anécdotas divertidísimas", ha escrito al respecto. "Me muero de amor por encontrarme con vosotros con motivo de este libro y firmar e intercambiar opiniones. Espero que os ayude tanto como a mí".

Alba Carrillo aseguró que si ella quería podía dinamitar la relación entre Canales e Isabel. 

También podría decantarse por volver al diseño. Ya lo intentó una vez, fue en 2015, antes de casarse con el tenista Feliciano López. En aquel momento ella estaba mucho más vinculada al mundo de la moda que ahora, pues hace años que solo hace desfiles de manera puntual. Como acababa de ser mamá, quiso aventurarse en el mundo del diseño creando la firma ‘Coco & Cocoilo’, en la que hacía conjuntos para ir combinados adultos y niños. Llegó a desfilar con una colección en la ‘Petite Fashion Week’, pero después del divorcio no se volvió a saber de esta firma. Entonces, Alba comenzó su andadura en televisión y quién sabe si ahora, que su vida ha dado un gran giro, se decidirá a retomarlo.

La inversión a largo plazo de Alba Carrillo

Por si estas opciones no fueran suficientes, Alba tiene otra. Ya hace años que comenzó a invertir sus ganancias. Lo hizo en ladrillo, concretamente en la casa en la que vive. Comprarla fue una de las primeras decisiones que tomó cuando su fama empezó a crecer. Firmó en 2012 la operación y se convirtió en propietaria de una vivienda unifamiliar con un tamaño considerable. 227 metros cuadrados construidos, sin contar garaje, ni jardín y piscina, que pertenecen a las zonas comunes. Tiene cuatro pisos: sótano, primera planta, segunda planta y ático, aparte tiene una terraza privada en la primera planta de seis metros cuadrados y un jardín trasero de treinta y dos.

A pesar de que después de comprarla se mudó con Feliciano a una que él construyó para cuando contrajeran matrimonio, Alba nunca vendió su casa. Fue a la que regresó cuando, sin haber llegado a cumplir el primer aniversario de boda, todo se le vino abajo. Entonces tomó la decisión: quién quisiera estar con ella tendría que venir a su casa. Ella tiene claro que no se marchará de nuevo y, hasta ahora, así ha sido.

Aquel momento fue complicado para Alba. Desde entonces, quiere ser ella la que lleve las riendas de su vida. Por eso, no es de extrañar que tras ser vetada en el canal en el que llevaba casi siete años trabajando haya buscado un nuevo camino profesional. Su vínculo con la cadena era fuerte. Además de ser comentarista en ‘Ya es mediodía’, participó en ‘Supervivientes’. Ha comentado realities en plató, estuvo durante un corto periodo de tiempo en ‘Sálvame’ e, incluso, estrenó un podcast con Nagore Robles.

Ahora todo eso queda atrás. Alba tiene que buscar un nuevo camino profesional y parece que quiere mantener su esencia, esa que le lleva a verbalizar casi todo lo que pasa por su cabeza, aunque no siempre siente bien a quién tiene enfrente. Sin embargo, lo que le apremiaría a comenzar ya esta nueva etapa no es, tal como hemos visto, necesidad económica alguna, si no, probablemente, ganas de seguir conectada al público y en pantalla.