Noemí Salazar se ha llevado un buen disgusto. Ayer por la noche compartió con sus seguidores de Instagram que había decidido darse un homenaje y pedir sushi para cenar. La exconcursante de ‘GH VIP 7’ explicó que necesitaba darse un capricho como este porque lo había pasado bastante mal con un tema que tiene que ver con su trabajo. Noemí quiso dejar claro que no se trataba de nada grave, pero eso no quita para que ella se disgustara. Sus seguidores reaccionaron con preocupación y quisieron saber cómo se encontraba y los motivos de su malestar. Así que para que no se preocuparan por ella, la estrella de los ‘Gipsy Kings’ no ha dudado en compartir a qué vino su tristeza en el día de ayer.
Si algo caracteriza a Noemí, es su espíritu emprendedor. Son varios los proyectos de moda y belleza que ha llevado a cabo, y en cada uno de ellos se vuelca muchísimo. Ahora está a la espera de poder sacar su próxima línea de piel, pero el proyecto cada vez se retrasa más. Y este retraso es el que tiene a la amiga de Alba Carrillo tan disgustada. En los últimos meses se ha encontrado con varios contratiempos que han hecho que las cosas no hayan podido estar listas cuando ella pretendía.
Tal y como ha explicado Noemí, su disgusto tiene mucho que ver con su forma de ser. Es muy perfeccionista y le gusta que las cosas salgan tal y como ella quiere. Pero teniendo en cuenta la crisis del coronavirus y algún que otro contratiempo, esta vez no ha podido ser. “Soy muy maniática con todo, la línea tenia que haber estado a la venta hace mucho tiempo, veo que todo se atrasa, soy muy perfeccionista. Justo nos quedaban unos pequeños remates y no ha podido ser. Ya me he irritado, me he agobiado, mete puesto a llorar…”, ha contado sobre cómo se ha sentido ante una situación que se le ha descontrolado. Eso sí, no ha dudado en terminar su mensaje mostrándose muy positiva. “Gracias a Dios se ha solucionado y espero que esté a la venta pronto porque he trabajado mucho”, ha concluido mucho más tranquila.