Ana Boyer y Fernando Verdasco por fin se dieron el ‘sí quiero’ el pasado siete de diciembre en la isla caribeña de Mustique. La última gran boda del año ha llegó cargada de polémica desde el mismo día de su anuncio, entre otras cosas porque el lugar elegido no estaba al alcance de todos los bolsillos, aunque al parecer una vez allí los novios costeaban el resto de gastos a sus invitados.
Quién sí podía desplazarse hasta el evento con su avión privado era Enrique Iglesias, el hermano de la novia. Sin embargo, el cantante fue el gran ausente de la boda.
Enrique ha mantenido siempre una estupenda relación con Ana, que es dieciséis años menor que él. Ambos se han intercambiado comentarios en redes que reflejan esta buena sintonía que tienen el uno con el otro, así cómo fotos que también lo demuestran.
Sin ningún concierto en su agenda y pudiendo volar con su jet desde Miami y llegar en pocas horas… ¿Qué motivo tendría para no asistir a uno de los días más importantes de la vida de su hermana?
Parece ser que sería otra de las polémicas de la boda: la exclusiva que los novios han vendido a una conocida revista. Según la opinión del programa Socialité y de muchos otros, Iglesias no quería posar para una revista y por eso se negó a acudir al enlace. El cantante vive de su música y no de estos reportajes y al parecer no estaría de acuerdo con formar parte de todo esto.
Lo que sí es cierto es que Enrique Iglesias tampoco acudió en 2016 a la boda de su hermano Julio José. A tres días del enlace, cada día nos llegan en cuenta gotas más detalles sobre este. El tiempo dirá si es que el cantante no es muy fan de las bodas o hay algún motivo oculto detrás de toda esta historia.