El caso de Daniel Sancho (29 años) sigue dando de qué hablar. La semana pasada estuvo marcada por la entrevista a Big Joke, una en la que ofreció informaciones que fueron destapadas como mentiras. Silvia Bronchalo sigue aprovechando cada día que puede para visitar a su hijo mientras se habla del inminente viaje de Rodolfo Sancho (48 años) a Tailandia para poder reencontrarse con su hijo en la prisión de Koh Samui, donde se encuentra encarcelado. Esto ha provocado que un abultado grupo de periodistas se agolpe en las puertas de la cárcel a la espera del actor. Su presencia ha provocado quejas.
La investigación del asesinato y posterior descuartizamiento del cirujano colombiano Edwin Arrieta (44 años) sigue su curso. La Policía tailandesa está ultimando los detalles del informe que debe enviar a la fiscalía para que puedan disponer de todas las conclusiones antes de dictar sentencia. La familia de Daniel Sancho está haciendo frente cómo puede a una situación que les ha desbordado. Se continúa especulando sobre diversos aspectos que los distintos portavoces de la familia se encargan de desmentir.
La presión mediática es elevada, ya que tiene la atenta mirada de los locales, España y Colombia. Esto se traduce en la presencia de decenas de periodistas en las puertas de Koh Samui, la prisión en la que Daniel Sancho se encuentra a la espera de juicio. Todo esto dificulta el normal desarrollo de la investigación y de la propia rutina de la cárcel, entorpeciendo la actuación de los profesionales que allí trabajan y el acceso de otras familias. De hecho, a partir del pasado lunes la prensa española ya no puede entrar en las instalaciones de la prisión en la que se encuentra el detenido español porque la imagen que se está emitiendo de la ciudad no gusta a las autoridades tailandesas.
Lo que ha prometido Rodolfo antes de viajar a Tailandia
"Estamos pidiendo que se baje la presión mediática en la cárcel que lo que hace es entorpecer el día a día de la cárcel, de otras familias...", decía Carmen Balfagón, portavoz de la familia, en 'Fiesta'. Hablaba de situación que se vive en Koh Samui donde la prensa se agolpa en las puertas.
La criminóloga insistía en lo importante que es para la familia Sancho el respeto de los profesionales que cubren el caso. "Yo os tengo que respetar, pero hemos pedido que se bajara la presión", aseguraba. "Así me lo ha pedido Rodolfo", añadía. El motivo por el que el actor, a través de los portavoces de la familia, hace especial hincapié en este problema porque es consciente de que, de no bajar dicha presión, puede haber consecuencias.
Estas quejas las estaría recibiendo la familia Sancho desde el primer día. La Policía tailandesa es consciente del seguimiento que se está haciendo por parte de la prensa española, y saben lo importante que es para los periodistas ser testigos de la llegada del actor a ese esperado reencuentro con su hijo. "Si el problema es que hace falta esa foto de Rodolfo llegando a la prisión, me comprometo a avisaros el día que va si con eso mitigamos la presión mediática", decía en un intento de mitigar esa presión a las puertas de Koh Samui. Con este mensaje, Rodolfo Sancho querría evitar lo que día a día sufre Silvia Bronchalo, siendo grabada a diario en las puertas de la prisión.
El esperado reencuentro de Daniel Sancho con sus padres
Daniel Sancho puede recibir visitas desde el primer día. Su madre se trasladó a Tailandia para comprobar el estado de salud de su hijo en cuanto le fue posible. Quería mostrarle su apoyo e intentar buscar alguna explicación a todo lo que está pasando. Día tras día, Silvia Bronchalo se traslada hasta Koh Samui para poder estar junto a su hijo, pero sus encuentros no siempre son agradables. La Policía tailandesa puso fin al primero de ellos al ver cómo ambos lloraban desconsoladamente, mostrándose totalmente derrumbados.
Con su padre, Rodolfo Sancho, ha podido hablar a través de videollamada. El actor no ha viajado aún a Tailandia. Eso estaría a punto de cambiar. Irá en la primera semana de septiembre. Sus encuentros con sus padres han sido, hasta ahora, sin contacto. Unos, con una pantalla de metacrilato entre ellos; otros, con una pantalla mediante. Sin embargo, 'Fiesta' comentó la posibilidad de un encuentro sin 'obstáculos'. "Por ahora va a ser bastante complicado. La última palabra la tiene el juez, pero ahora no va a suceder", corregía Two Yupa, que hacía de traductora de las palabras del director del centro penitenciario.