Fue el pasado 5 de septiembre cuando Mónica Carrillo decidió dar un paso al frente y contar que había sufrido cáncer de piel. La presentadora, muy reacia a hablar públicamente sobre su vida privada, compartió una extensa publicación en su cuenta de Instagram para explicar que durante sus vacaciones había tenido que ser intervenida de un carcinoma basocelular que tenía en su rostro.
Meses después de contarlo en Instagram, Mónica Carrillo se ha sincerado sobre cómo vivió todo este proceso con su amiga Ana Pastor en un directo de Instagram para Newtral. La presentadora de Antena 3 ha decidido dar un paso al frente para contar su experiencia a gente que esté pasando por este mismo proceso.
Un paso por el quirófano que tuvo muchas consecuencias para ella. “Aunque no hay un peligro de muerte, te puede afectar. Yo tuve consecuencias en lo personal y lo profesional”, ha confesado durante la conversación con Ana Pastor.
En concreto, Monica Carrillo ha explicado que el carcinoma le afectó tres partes de su rostro, con distintos tejidos que formaban parte de la nariz, lo que provocó que el cirujano tuvo que darle “un montón de puntos” que posteriormente formaron una profunda cicatriz en forma de “colgajo de nota musical” que todavía hoy la acompleja. “He estado con apósitos y cubierta todo el tiempo, a la sombra y procesándolo. Aún a día de hoy me cuesta asumir que es algo que se nota, pero esto es así, es lo que hay”, ha asegurado.
“A nivel personal toca ir aceptándote”, ha afirmado Monica Carrillo, para quien este proceso ha sido muy duro. “Ha sido como envejecer de golpe, como si cuando te quedas embarazada de un día para otro te sale la barriga de nueve meses. Y claro, luego cuando das a luz te suelen quedar secuelas físicas como las estrías”, ha continuado explicando.
Una etapa de su vida en la que la presentadora ha aplicado la filosofía japonesa del kintsugi, que se centra en “el arte de reparar las fracturas de cerámica con resina de oro para evidenciar que los defectos forman parte de nosotros y, en ocasiones, son las más grandes virtudes”.