Ya estamos en verano y los felices mortales que tienen la playa cerca o, en su defecto, una buena piscina a mano, ya han podido disfrutar del primer chapuzón veraniego. Tras el duro confinamiento provocado por la pandemia, por fin hemos llegado a la nueva normalidad, al verano y al disfrute del sol y la naturaleza, eso sí, tomando las debidas precauciones porque el maldito bicho sigue entre nosotros.
Y quien sí ya se ha dado su primer chapuzón ha sido Miguel Verdasco, el hijo del tenista Fernando Verdasco y su mujer, Ana Boyer. El nieto de Isabel Preysler, con su bañador de barquitos y pingüinos y bien protegido del sol con un sombrero, se adentra en la pileta buscando los brazos de su papá. En nada, el chaval se meterá en el agua con sus manguitos o su flotador, tan feliz.
"Mis dos amores", comenta Ana Boyer, quien seguramente es la que ha realizado las fotos para dejar inmortalizado el momento. También Isabel Preysler ha dado un 'like' a la imagen, y es que Isabel adora a sus nietos y a Miguel, las cosas como son, es al que tiene más cerca. Sus otros nietos, los dos hijos de Chábeli, Alejandro y Sofía, así como los gemelos Nico y Lucy, y la pequeña Mary, hijos de Enrique Iglesias, viven en Miami, EE UU.
Como se sabe, Ana Boyer y Fernando Verdasco –que acaban de vender su casa de Madrid por 1,6 millones de euros– se instalan en casa de Isabel cuando se encuentran en España, pues su residencia oficial está en Doha. Desde esa ciudad, capital de Qatar, uno de los Emiratos Árabes Unidos, Verdasco vuela allá donde se dispute un torneo de tenis, y Ana y el bebé siempre le acompañan.