El mensaje de Xenia Tostado, mujer de Rodolfo Sancho, sobre sus Navidades sin Daniel Sancho que ahora cobra un nuevo sentido

Hace un año, Xenia Tostado se enfrentaba, junto a Rodolfo Sancho, a sus primeras Navidades sin Daniel, ya entonces en prisión en Tailandia

Gema Amil
Gema Amil

Redactora Jefe digital de Lecturas

Xenia Tostado
Instagram @xeniatostado

Las Navidades vuelven al hogar de Rodolfo Sancho y Xenia Tostado. La pareja se enfrenta a esta complicada fecha con la sentencia de Daniel en la mesa. Una condena durísima que ha hecho que el joven continúe en prisión en Tailandia. Meses después de escuchar el veredicto del juzgado de Koh Samiu, el padre del joven y su actual pareja reposan en su hogar. No son tiempos sencillos pero intentan llevarlo, seguramente, de la mejor forma posible. Sobre todo por el bien de su familia.

Mientras el equipo legal de Daniel Sancho ultima el recurso que tienen pendiente de presentar contra la sentencia que condenó al joven por el asesinato con premeditación de Edwin Arrieta, los Sancho guardan silencio. Tanto Rodolfo Sancho, que no se ha pronunciado tras el documental que grabó para HBO, como de su pareja y sus hermanos. Todos se encuentran volcados en reconstruir sus vidas después del trance de más de un año que han vivido a la espera de juicio.

Hace ahora doce meses, Tostado compartía una serie de mensajes en sus redes sociales que desvelaban cómo afrontaban sus primeras Navidades sin Daniel Sancho. Unas palabras que ahora vuelven a cobrar un gran significado.

El mensaje de Xenia Tostado

El hijo de Rodolfo Sancho está encerrado en la cárcel tailandesa de Koh Samui desde el pasado mes de agosto de 2023 tras confesar haber descuartizado al médico colombiano Edwin Arrieta. Desde ese momento, la vida de la familia de Rodolfo Sancho cambiaba para siempre. El actor se centraba en la defensa de su hijo y combinaba, como podía, sus viajes a Tailandia con su familia, formada por su mujer y su hija pequeña.

Xenia Tostado, pareja de Rodolfo Sancho y madre de la hermana pequeña de Daniel, compartía en redes sociales, hace ahora un año, varias publicaciones en las que deslizaba cómo está viviendo su Navidad más extraña y triste. Centrada en su trabajo, en sus proyectos y en su núcleo fuerte, Xenia subía publicaciones y stories insistiendo en que su autocuidado, su paz mental y su trayectoria profesional son ahora su máxima prioridad, además de estar al lado de su pareja y de su niña, sus pilares fundamentales.

"Llevo días sintiendo la necesidad de expresar mi preocupación y el miedo que siento como madre. No sabemos si estamos seguros. Mi hija vive totalmente al margen de todo lo que está pasando y así será mientras podamos y nos lo permitan. Estoy al lado de mi pareja en este profundo dolor que atraviesa como padre, nadie se hace una idea. Desde la fortaleza que somos los dos, vamos a proteger a nuestra hija por encima de todo, ella es nuestra prioridad", dijo la actriz el pasado verano, poco después de que el presente y el futuro de Daniel Sancho cambiaran para siempre.

Año y medio ha transcurrido desde que tuviésemos noticia de la detención de Daniel Sancho en Koh Samui. El joven era acusado de haber acabado con la vida del cirujano Edwin Arrieta y todo se precipitaba. Comenzaba en ese momento uno de los casos con más repercusión internacional de los últimos tiempos.

El silencio de Xenia Tostado

La actriz tomaba una decisión tajante tras conocer la sentencia de Daniel, el hijo de su marido. Si durante los primeros meses de investigación, Tostado no había tenido problema en compartir en redes sociales sus reflexiones acerca de la vida o algunas instantáneas de su día a día, llegaba un punto en el que todo cambiaba. La pareja de Rodolfo Sancho cerraba su cuenta en instagram. Ya no quería saber nada de todo lo que ocurre en el mundo virtual.

No solo este año y medio ha sido complicado para la familia de Daniel Sancho. La sentencia del tribunal de Koh Samui caía como un jarro de agua fría. En todo momento se esperaba, desde la defensa del hijo del actor, que el tribunal tuviese en consideración su tesis. Los abogados pretendían desmontar la acusación de premeditación sobre el asesinato de Edwin Arrieta. Algo que no lograban. Daniel Sancho era condenado a cadena perpetua en Tailandia.

Desde entonces, el silencio ha sido la consigan en toda la familia. La llegada de las Navidades, unas fechas tan especiales, no hacen más que evidenciar las ausencias. Tanto para los Sancho como, sin duda, para los Arrieta. La muerte de Edwin ha dejado a sus padres y su hermana totalmente desolados.

Las Navidades de Daniel Sancho en Tailandia

La Navidad en las cárceles de Tailandia comienza el día 8 de diciembre con el Día de Buda, en el que comen arroz y galletas. En el resto de celebraciones y con la posibilidad de usar su peculio para conseguir un menú mejor, Daniel Sancho pasará la Navidad acompañado de sus compañeros de prisión, con los que "es muy amigable". Además, es probable que haya hablado con sus seres queridos, como sus padres, amigos o su abuela, por videollamada, ya que tiene la posibilidad de hacerlo.

Poco tienen que ver estas Navidades con las que ha vivido el resto de su vida. Daniel Sancho, que mantenía una relación compleja con sus padres a juzgar por las informaciones que se han ido publicando, disfrutaba de estas fiestas. El hijo del actor tenía un nexo de unión fuerte con su abuela, con la que convivía. Ahora, encerrado en la cárcel en Tailandia, espera las noticias de su equipo de abogados. La sentencia del tribunal de Koh Samui no ha dejado margen a la duda.

El hijo del actor tiene un panorama difícil. Su equipo legal se prepara para presentar el recurso con el que intentarán dar la vuelta a un veredicto contundente. El tribunal consideró que Sancho había planeado el asesinato de Arrieta con antelación. También fue condenado por ocultación del cuerpo y falsedad documental. Una serie de delitos que hacen que su estancia en la prisión vaya a ser larga. Como mínimo y de no admitirse las pretensiones de la defensa, tendrán que pasar diez años hasta que pueda iniciar el proceso para regresar a España.