Melanie Griffith acaba de descubrir que lleva 20 años sufriendo ataques epilépticos. Lo ha anunciado en el marco de una conferencia celebrada con motivo del Women’s Brain Heatlh Initiative, liderada por la también actriz Sharon Stone. Y es que durante todo ese tiempo los médicos no habían sabido ponerle nombre a los episodios que sufría.
Ahora se ha percatado que sus ataques epilépticos tenían lugar cuando se enfrentaba a situaciones de gran estrés. Y no le ha pasado desapercibido otro detalle, que su dolencia mejoró, y mucho, cuando se separó de Antonio Banderas. "El divorcio fue la verdadera cura para mí", dijo durante la conferencia.
Durante 20 años, Melanie sufrió estos ataques sin saber a qué se debían. "Nunca supe por qué sucedía. Los dos últimos ataques me dieron a bordo de un barco en Cannes. Tuve una gran convulsión y me llevaron al médico, luego volvimos al yate y me dio otra. Cuando volví a Estados Unidos fue cuando me dijeron que tenía epilepsia, algo que nunca me habían dicho en estos 20 años”, ha contado.
La actriz confiesa también que la medicación ha sido una gran ayuda, aunque no la única. "Me he estado medicando durante estos últimos cuatro años y no he vuelto a tener otra convulsión tan fuerte, pero en este periodo también me he divorciado, que creo que fue la verdadera cura para mí", ha confesado.
Para Melanie, el estrés era un detonante de sus ataques epilépticos. "Ya no me siento estresada. Las mujeres nos hacemos cargo de la familia, tenemos el marido, una vida, los niños, la casa, trabajamos, no podemos dormir por la noche porque estamos levantados con los hijos... Creo que no he dormido bien en los últimos 35 años. Todavía no lo hago. Mi ciclo de sueño está totalmente jodido".