Casi tres meses después de protagonizar su último acto público, por fin hay fecha para la reaparición de Meghan Markle y el príncipe Harry. Será el próximo sábado 26 de febrero cuando los duques de Sussex vuelvan a dejarse ver juntos en público y lo harán como unas auténticas estrellas de Hollywood en la gala de los NAACP Image Awards, donde recibirán uno de los galardones.
Meghan Markle y el príncipe Harry acudirán a la entrega de los galardones de esta asociación, que defiende los derechos de las personas de color y lucha por la desigualdad social. La gala, que se retransmitirá en directo por televisión, comenzará a las ocho de la tarde (hora de la Costa Este de Estados Unidos) y servirá a los duques de Sussex para afianzar su papel como auténticas estrellas americanas. En concreto el nieto de Isabel II y su mujer van a recibir un galardón con el que se reconoce su “logro notable y un valioso servicio público”.
"Estamos encantados de presentar este premio al príncipe Harry y Meghan, el duque y la duquesa de Sussex, quienes juntos han escuchado el llamamiento a la justicia social y se han unido a la lucha por la equidad tanto en los EEUU como en todo el mundo”, ha asegurado el presidente y director ejecutivo de la NAACP, Derrick Johnson.
Los duques de Sussex, por su parte, han querido agradecer este galardón públicamente: "Los esfuerzos de la NAACP para impulsar la justicia racial y los derechos civiles son tan vitales hoy como lo fueron hace casi 115 años”.
Además de recibir este premio, Meghan y Harry han inspirado el galardón NAACP-Archewell Digital Civil Rights Award, para reconocer “a los líderes que crean un cambio transformador, en la intersección de la justicia social y la tecnología, para promover los derechos civiles y humanos”. De nueva creación, este año se lo llevará Safiya Noble.
Los galardones, por lo tanto, van a ser muy importantes para los duques de Sussex, quienes van a reaparecer públicamente en un acto en Estados Unidos, mientras que en Reino Unido continúan con sus batallas legales, tanto contra el Gobierno británico por su seguridad como contra la prensa.