Mayte Zaldívar rehace su vida y lo hace volviendo a sus orígenes: los fogones. No en vano, tiene fama de ser una gran cocinera. Aprovechando sus dotes culinarias, la expareja de Julián Muñoz está a punto de inaugurar un proyecto en común con el hombre que no se ha apartado de su lado ni en los momentos más complicados: su novio Fernando Marcos.
Lo último que sabíamos de ella es que conseguía un trabajo de niñera, contratada por su hija para cuidar de su nieta. El juez le concedía entonces la libertad condicional hace menos de un año, en diciembre de 2016. Dos años antes, en 2014, Zaldívar entraba en prisión tras ser condenada por un delito de blanqueo de capitales.
Mayte ha estado trabajando para remontar y el resultado es El Puesto 85, el establecimiento que inaugura en breve en el mercado de abastos de Marbella, según apunta El Español.
Hace años, ya había estado 'gobernando' dos restaurantes cuando estaba felizmente casada con el exalcalde de Marbella. Por aquel entonces, el matrimonio remaba unido en Mayte I y Mayte II, donde Zaldívar cocinaba y Julián se encargaba de servir las mesas.
Sin embargo, este nuevo proyecto poco tiene que ver con aquellas dos incursiones anteriores. El Puesto 85 nace con la pretensión de ser un espacio gourmet en cuya carta coexisten platos tan elaborados y tan de moda como el salmorejo de aguacate con ceviche de salmón, alga wakame y cebolla morada con brotes de rábano o los tacos con salmón marinado y perlas de limón.
Un establecimiento que significa una nueva vida y por el que no puede estar más agradecida a su pareja, de que ha dicho que "se merece una medalla por todo lo que está haciendo por mí".
El negocio gastronómico nace con polémica y ya ha despertado los primeros recelos entre algunos 'vecinos' de mercado pues, según su versión, es muy difícil conseguir un puesto en el recinto.