Poco o nada podía esperar Julián Muñoz (76 años), cuando se marchó a vivir con Isabel Pantoja a la casa que bautizaron como ‘Mi gitana’ que se formaría uno de los escándalos más recordados de la historia del panorama social español y que veinte años más tarde, serían sus hijas y su exmujer, Mayte Zaldívar (67 años) quienes iban a estar a su lado en uno de sus momentos más duros. El exalcalde de Marbella, que acaba de fallecer a los 76 años, ha pasado sus últimos años envuelto en un amor incondicional de parte de su expareja, que se convirtió en su gran apoyo en el peor instante vital.
Mayte Zaldívar, el gran apoyo de Julián Muñoz
La situación en los últimos años ha sido muy dura para toda la familia, todos han estado volcados en estar a su lado desde hace varios años, pero ha sido muy destacado el hecho de que Mayte también haya decidido estar junto al padre de sus hijas después de su tormentoso divorcio. Esto es algo que, si bien puede sorprender, se ha ido dando de manera natural, porque hasta el final han compartido una familia: tienen dos hijas, Elia y Eloísa, la primera de ellas es fruto natural del ex matrimonio y la segunda es de una relación anterior de Mayte pero fue adoptada por Muñoz con solo dos añitos.
Tanto es así que esta última etapa la han vivido juntos, como una gran familia, incluyendo a la actual pareja de Mayte, Fernando, con el que lleva saliendo varias décadas. En el último programa de ‘¡De Viernes!’, era la propia Mayte la que hablaba de su peculiar situación: "En cuanto a la logística te puedo decir que todos vivimos juntos, comemos juntos y estamos todo el día juntos, y cuando llega la noche pues cada uno se acuesta en su cama, juntos pero no revueltos".
En este mismo programa quisieron también tratar el tema de su reciente boda, ya que el exmatrimonio decidió volver a darse el ‘sí, quiero’ hace unos meses: "La idea de casarnos la tomamos entre todos, incluido Fernando. Julián se puso a llorar y le preguntamos qué era lo que le pasaba, y él nos dijo que le daba mucha pena que no estuviéramos casados, ¿tú quieres que nos casemos y te quedas más tranquilo para ver de nuevo tu familia unida? pues venga, lo hacemos. Os puedo asegurar que el motivo por el que nos casamos no son 400 euros de pensión", explicaba Mayte.
Julián habló sobre Fernando, pareja de Mayte
El propio Julián quiso abordar en esta última entrevista la especial relación que mantenía con Fernando, la verdadera pareja de su exmujer: "Fernando para mí es una persona que merece todos mis respetos, cuando alguien está con alguien es porque quiere estar. Fernando es un hombre que a mí me trata con mucho respeto igual que yo a él, la gente que piense lo que quiera (...) Es tanta la felicidad que siento ahora, me siento tan querido, que me da muchísima rabia irme. Maite, te he querido mucho, no he dejado de quererte nunca, he perdido la olla, pero te sigo queriendo", relataba muy emocionado.
La relación de Julián Muñoz y sus hijas
Con ellas las cosas tampoco fueron sencillas, Elía y su padre estuvieron más de seis años sin hablarse, mientras él mantenía todavía una relación con Isabel Pantoja, pero todo se arregló cuando les pidió perdón tanto a ella como a su hermana, y las dos fueron un gran apoyo mientras estuvo en prisión, de hecho, en sus últimos momentos vivía con Eloísa. Lo que nadie en la familia esperaba es que lo que les volviera a unir sería la enfermedad de la joven, que en 2022 sufrió un cáncer del que ahora está bastante recuperada.
Algo que jamás podría considerarse positivo, pero que sí tuvo como consecuencia el acercamiento de sus dos padres, no como pareja, si no como dos personas con una historia y una familia común que querían el bien de Elia y de su nieta, y que comenzaron a poder estar en el mismo espacio y tiempo e incluso a recuperar el cariño que algún día el rencor y los acontecimientos dejaron en el olvido. De hecho, las últimas Navidades, desde que él salió de prisión, las han pasado todos juntos, incluido Fernando, la pareja de la de Castellón desde 2004.
Pero si ya conocíamos que las cosas entre ambos se habían suavizado, pues la propia Mayte así lo desvelaba hace ahora dos años en la docu-serie en la que relataba su historia; "Perdoné a Julián, está muy perdonado. Que los días que le quedan los viva en paz y rodeado de la gente que le quiere. A la otra parte no la voy a perdonar jamás. Claro que lo quiero. Claro que quiero al padre de mis hijas" decía muy convencida, y la información que hemos tenido después y que conocemos actualmente lo corrobora. Por ello la hemos visto a las puertas del hospital donde ha estado ingresado, y es una de las personas que le está prestando su ayuda cuando lo necesita, que está pendiente de sus citas médicas, y que tal como está digital ha podido saber, conversa con él cuando están juntos e incluso recuerdan en alguna ocasión anécdotas del pasado que les hacen reír.
Y mientras tanto continúan con su vida. Elia, tras el cáncer, decidió emprender con un negocio en el que desarrollar una pasión por la pintura que desconocíamos que tenía. Lo llamó ‘Tiestos con arte’, y lo que hace es pintar macetas que envía a quién le apetece decorar su casa y mimar sus plantas. Eloísa dedicaba gran parte de su tiempo a Julián, siendo la que ha vivido más de cerca su enfermedad, y Mayte continuaba con su negocio, el gastrobar Puesto 88 que abrió en 2017 junto a su pareja, Fernando Marcos, y parece ir mejor que bien, pues siempre tiene gente sentada a la mesa y sus reseñas y criticas son casi en su totalidad positivas.
En definitiva, a su modo, y con sus más, y sus sonadísimos y televisados menos, al final consiguieron ser una familia unida, y llegar a un punto de entendimiento y ayuda que seguro que Muñoz agradeció más que nunca, pues si de algo se arrepentía, y él lo repetía siempre que tenía ocasión, es del daño que hizo en su momento a las que es evidente que fueron las mujeres de su vida.